Dos soluciones y tres problemas: el spidermóvil, El Chapucero y Toy

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PROBLEMA1: EL EXTRATERRESTRE CHAPUCERO Sorpresa: uno de los primerísimos enemigos de Spiderman es un extraterrestre que intenta invadir el planeta. El final es tan tonto que nos hace dudar sobre la idoneidad de Stan Lee y de Steve Ditko para llevar a cabo la serie de Spiderman. Fue en The Amazing Spider-Man 2 USA, cosa que sé porque lo pone en la viñeta que hemos fotografiado. Para una referencia más reciente que puedo contrastar, Biblioteca Marvel: Spiderman 1 de Comics Forum... pero que hay ediciones anteriores e incluso más nuevas, en esos tomos de Panini que sirven para construir bloques de pisos:

Pero no nos hace olvidar a ese misterioso personaje: el Chapucero. 

 

Ahí sí que hay una chapuza de laas buenas.

¿Una invasión extraterrestre? ¿Otra? ¿Un alienígena? ¿Otro? ¡Qué falta de imaginación!

No nos hace olvidar, sin embargo, a un personaje tan adecuado, con un taller como de relojero o de zapatero remendón, en el que se puede incluso notar el olor aceitoso de la maquinaría. 

También hay que recordar que la mayoría de aventuras de Spiderman son de conflicto generacional: Spiderman se enfrenta a viejos, a generaciones anteriores: no hace caso a su tío Ben, lucha contra el Buitre, que es un jubilado (y aún lo veremos en una de esas urbanizaciones de jubilados que hay en USA), lucha contra el Chapucero que también tiene sus años, y se enfrenta de una u otra manera contra Jameson. No se puede decir que sea obediente con Tía May ni que la trate tan bien como se merece, si es que se lo merece. Y el enfrentamiento clave contra El Duende Verde, que es el padre de su amigo es de libro. Vemos la versión pro-spiderman pero podríamos tener la opuesta: el huérfano pobre o precario se enfrenta al padre de su presunto amigo rico que lo tiene todo. Ambos, como sí se puede rescatar de la primera película de Sam Raimi, se identifican como grandes cerebros. Cerebros, eso sí, de dos generaciones en liza. Con el Doctor Octopus aún es más evidente porque él mismo se niega a ser superado por ese jovenzuelo, y lo repite hasta su gran lucha, la de la pérdida de los brazos, en 1981-1982.

La solución, sencilla y magnífica, vendrá en el Amazing Spider-Man 160 con fecha de portada september 1976 p14v1v2 y un precio de 30c. Mi edición: John Romita Spiderman 64,  Comics Forum. 5 Años Excelsior. 3.60€, de abril de 2004, aunque yo lo compré un jueves de octubre de 2016.

La historieta no puede ser otra que la titulada ¡Mi asesino, el coche! con el eminente guionista Len Wein, con el aburrido Ross Andru, aunque le perdonamos porque él sí que hace fondos con edificos y escenarios neoyorquinos de verdad, y con el entintador Mike Esposito.

PROBLEMA2:  SPIDERMÓVIL.. Vamos a lo que vamos: algún idiota quiso que Spiderman tuviera coche de juguete. Se ve que Stan Lee aceptó la idea -¡mardito parné!- y el muy limitado Gerry Conway (imperativo: léase The Mighty Thor para comprenderlo) le siguió el juego

Gerry Conway and Russ Andru created the wall-crawling Spider buggy roadster in 1974’s Amazing Spider-Man #130

  Peter Parker sí había tenido una motillo, la pintó de azul que era a rojo o al revés, y la dejó olvidada. Si va por la ciudad y no quiere columpiarse por "los cañones de cemento", toma el autobús. Pocas veces lo vemos en metro. ¿Taxis, motos, coche propio? Nunca. Y menos un "spidercoche" que es un buggy rojiazul. 

SOLUCIÓN2: De Marvel, como del cerdo, se aprovecha todo, así que acabo siendo convertido en un supervillano en una nueva versión de la inquietante película de Steven Spielberg, El Diablo Sobre Ruedas, de 1971. Título original aburrido: Duel.

Así que es como una venganza: hay coche pero es "de los malos". 

¿Quién lo manipula? Lo voy a contar. Que nadie se me ponga a llorar: El Terrible Chapucero. Prefiero "Temible".

Spiderman acaba de decir en p13v8: ¡Pero eres un alienígena!

SOLUCIÓN 1 la cuenta: 

 El Terrible Chapucero en p14v1: En absoluto. La máscara que te quedaste era solo una treta... ¡un ardid para frenar tu persecución que funcionó excepcionalmente bien! 

Y ahora viene lo mejor, algo que realmente explica y cambia el Universo Marvel en cuanto a supervillanos en p14v2: 

El Terrible Chapucero p14v2: Desde entonces, decidí diseñar armamento especial para otros de mi clase en vez de arriesgarme yo mismo. ¡Hasta ahora! Me ha contratado alguien que desea reanudar su relación contigo, muchacho, y tengo que entregarte a él. 

Eso explica de dónde sacan las armas, trajes, arneses, arreglos, modificaciones... montones de superdelincuentes... y sus tropas de apoyo, porque no pocos van con un montón de mercenarios pertrechados con trajes adecuados. 

PROBLEMA3: se llama Toy. Y es una variante de Mister Proper (el nombre alemán porque Alemania manda en la economía de Europa), que ahora y desde hace mucho se llama en España Don Limpio pero que en Estados Unidos es Mister Clean desde 1958 en que sale su primer anuncio.

Puede ser un chiste, una broma: un tipo alto calvo, con los brazos en cruz musculosos, la camisa de manga corta, y apenas habla. Es negro. Mister Proper nos parece más bien como asiático oriental, tipo chino. Ahora es un viejo con el pelo blanco, no sé por qué, si es que son canas o se le ha descolorido de la lejía.

El caso es que ¿para qué necesita un ayudante que apenas habla el listorro del Chapucero? ¿Por qué no puede hablar bien?, y entram
os en un tema sobre el trato a los personajes negros en los medios de comunicación.

Es que, encima, "Toy" significa "juguete": el subalterno forzudo y de poca mente y negro resulta que es un juguete (no descartemos que sea un robot) del jefe blanco tecnificado, el Chapucero

En concreto, en Spiderman años 1970, raro es el negro que no sea malo, delincuente de poca monta... hasta llegar al niñato aquel del patinete. Se puede justificar un poco pero no mucho por la extracción social y de barrios conflictivos pero, aparte de Joseph "Robbie" Robertson, el editor de Local del Bugle.

Puede que el chiste estribara en una gran campaña comercial que hubiera hecho muy reconocible a ese personaje para los lectores.

Me quedo con la profesión del Chapucero como inventor y diseñador para los malo: es una grandísima idea que yo pensé que se habría inventado en 1998, cuando me lo topo en un tebeo de un "tomo familiar de Spiderman".