Data Estel·lar sin imágenes Diumenge 20130804
Iba caminando por el Saló del Comic 2013, con mi pulserita mágica, merced a la cual podía entrar y salir del recinto
ipso facto.
Nota importante: vi muchas cosas interesantes, muchos espacios curiosos, y me encontré con tal vez demasiada gente que me conocía o que los conocía o ambas cosas. La evidente conclusión es que me costó (de costar, de dificultad) tres largos días dar entera la primera vuelta. La primera tarde me di tristemente cuenta de que tendría que comprar algo antes de acabar mi primera revolucion (un poco de geometría, caramba). Hubo lugares, como
1001o Star Trek (con unos libros auteditados interesantes) a los que no fui capaz de regresar. Simplemente hubo paradas que desaparecieron de mi vista, en un espacio tácticamente no euclidiano x+n dimensiones, donde cada
giro a la izquierda me urgía a enfrentarme a elementos insospechadamente distintos.
Alguna vez pude sobreponerme y preguntar sobre el otrora sempiterno fanzine zaragozano de El Hombre Mosca a un pope del Malavida, en una rampa.
Con Star Trek pude volver a comprobar que existe buena sintonía con Star Wars (la nosécualagarrisonesqquargarden).
E incluso pude meter cuña con el
Doctor Who. Existe una especie de colección de crossovers de Star Trek con todo lo que pillan, y tabién con el Doctor Who.
Comentaron que estaban metidos en la publicación de comics de Star Trek. Me dijeron algo raro: que no existían, cosa extraña porque yo tengo alguno (el de la calva), y recuerdo haber visto algunos de bustos parlantes de los años 90. Pero, bueno, que algo tenían en marcha. A ver si sale bien.
En otro caso, no pude comprar un
Príncipe Valiente VII de Ediciones B (cosas mías) porque cada vez que llegaba allá me encontraba con algún amigo, conocido de tren (el calvo que no sabe quién soy) o foreros varios que hacían cola de firmas ante alguien que también era un colega forero... esas cosas de las que no me entero nunca. Gran frase para recordar: "para hacer cosas gafapastas no parece mala persona". Siempre temo, pero cada vez es para que a uno le dé más igual, que malinterpreten esas frases. No deberían hacerlo los lectores, guionistas o visualizadores de cultura popular en formatos audiovisuales. Sin embargo, uno se da cuenta de que hay una tendencia generalizada y tétrica a tomar el rábano por las hojas y las frases de manera literal, como si los guiones y la ficción no fueran antítodos y te obligaran a hablar sobre cosas anodinas y de manera anodina, cosa para lo cual uno se queda en cualquier calle y con cualquiera departe de lo de siempre, sin gastarse un euro ni desplazarse lejos del hábitat habitual.
En el que necesariamente tenía que ser mi último intento de hacer la primera vuelta completa, me dirigía sin intenciones de llegar hacia la firma de Cera y Ramis. Son los dibujante de
Los Xunguis (unos pitufos-astrosniks familiares directos de Dondestáwally). Fueron creados para la revista
ZipiZape Extra de la primera mitad de los años 90. Antes y durante, Ramis realizó miriadas de chistes sueltos y de tiras, portadas, contraportadas y secciones varias de
TBO, y creaba insólitos personajes como
Alfalfo Romeo, Doctor Burillo o Sporty, en una amplia variedad. Ni recopilaciones ni nuevas páginas es el legado de Ediciones B-Grupo Zeta. Cómo si Los Simpson fueran más cáusticos porque parecen botellas de lejía Conejo.
Cera es el autor de otras tantas páginas de chistes, tiras y series, entre las que destaca Pafman, por haber sido un personaje redevuelto desde entrada la década de los cerontas. La clave es ser un superhéroe de risa y que el editor repita que es como Batman y Superlópez. Las historietas antiguas son muy divertidas. Las modernas son aventuras largas, estupendas, repletas de chistes y de giros de guión continuos, así como de la curiosidad para el lector que nunca sabe qué tipo de formato será en el que se publicará. Yo apuesto para el siguiente por un paquete de pañuelos de papel. Con un plan de marketing adecuado,
Pafman se puede convertir así en un idolo gafapasta del intelectuloidismo alternativo. "Espero que no tenga que arrepentirme de habérmelo llevado" es una frase que tampoco le pareció hacer gracia. Pues ponga menos chistes sobre ñus pucelanos que luego le salen lectores así.
El caso es que antes de llegar a esa sesión de firmas, me topé con EDT, aunque seguramente que buscaba
Yoko Tsunos (ja) pero acabé con tomos del
Capitán Pantera y de Los Mercenarios ante mí.
Seguramente que EDT podía haber buscado una peor portada (a mí no me parece provocativo un fumador en una portada, que a veces parecéis tontos y otras fabricantes de cáncer)o se podria haber buscado un prólogo más insulso. Sin embargo, desconozco el modo. A mí me interesa el contenido: una serie de
Carrillo, que fue publicada en blanco y negro a salto de mata en varias revistas, unas de Bruguera y otras no. Publicarla en blanco y negro permitía respetar el formato original pero también abaratar costes en una Editorial Bruguera que estaba al final de sus días. Lo mismo haría en otras ocasiones entre 1985 y 1986, e incluso abusaría del blanco en fondos de historietas cómicas, como
Mortadelo y Filemón.
El caso es que veo a un señor con gafas oscuras. Pensé lo normal: desprendimiento de rétina. Nadie más atendía, cosa más habitual en demasiados puestos (¿ya he contado el tipo que estaba en otra editorial, ponennoseque, y no sabía ni lo que tenía a la venta, ni los contenidos ni de qué iban, ni casi los precios, salvo que era caro, todo en plan integrales?). Opté por preguntarle al señor de las gafas oscuras si era de allí, porque lo vi como jubilado expetanquero. Es que quería uno de éstos, de Los Mercenarios. ¡Y era
Carrillo! Aunque hubiera llevado (igual lo llevaba) lápiz, papel, grabadora... no me apetecía grabar todo aquello: un caudal de anécdotas entretienidas, de información bastante precisa e incluso opuesta a ciertos tópicos. En cuanto pude le cité los sampans (que no voy a explicar lo que es, porque para esto ustedes tienen el deber de leer historias de piratas malayos), y me dio la sensación, porque sólo sería eso, que se embaló un poco más.
Es imposible recordarlo todo. Vale la pena que le dejaran una sala de conferencias para que se explicara. Cómo trabaja un dibujante, cómo conseguir un proyecto propio, cómo encontrar las ideas, qué tipo de estilo de dibujo prefiere... e incluso el "no dibujo porque me operaron la vista", cosa que ya se veía por las gafas (bueno, lo vi yo, pero es como lo del sampán, que igual nadie más tiene ni idea, y yo aquí, fregando platos).
¿Por qué no te llevas el del
Capitán Pantera? Porque no es en color, y ya tengo las aventuras en color de la revista
Mortadelo y en un
Colección Olé."Oh, pero el color de Bruguera era nefasto, industrial... los franceses sí que cuidan bien el color". Y me dio la sensación de que no había visto el adecuado color (no defenderé todas la viñetas, que tampoco lo recuerdo todo) que le pusieron en Bruguera: a un dibujo de linea clara le pusieron unos colores un poco a lo Tintín. Habló sobre el tomo de la serie Varios de la Colección Olé: es como si no le hubieran ni consultado, pero se hubiera vendido más bien que mal, y, sin embargo, no hubieran decidido hacer una segunda edición u otro número. Medio me confirmó el desastre de gestion denominado Ediciones B-Grupo Zeta. Pasó a alabar las excelencias de los tomos bien encuadernados ("cosido, porque pegado es peor") de EDT, porque "este [chico, o algo así, creo que dijo] no sé ni cómo se ha acordado de mí, y me ha hecho estas ediciones tan magníficas" (palabras aproximadas, entusiasmo no aproximado sino real). Supongo que se refería al editor Joan Navarro. Yo lo veo: una mesa con Navarro y
Carrillo.
Carrillo se enrolla, que a mí me encanta eso, pero
Navarro lo puede guiar. Bueno, al menos tendríamos un buen espectáculo.
Sobre la buena encuadernación del tomo dije sin tapujos: "eso ya se lo diré de aquí a dos años".
Me dijo que él dibujaba guiones ajenos para el mercado extranjero (Inglaterra, etc.). Ganaba bastante dinero. "Los dibujantes siempre hemos vivido bien". Creo que para los años 50 o 60 ya me dijo algo de que ganaba como 3500 pesetas al mes (y que los ingleses aún pagaban mejor), cosa que me consta que era bastante porque un obrero especializado con su FP II acabada en los años 70 tal vez ganara eso. Era una cantidad, fuese la que fuese, importante. Y además rompe el tópico del dibujante esclavo mal pagado, esclavo y casi asustado de vivir. ¿Quién se iba a preocupar de los derechos de autor?
Pero ¿qué pasa? y saltó a algo que no tenía nada que ver (muy maginotécnico), que muchos dibujantes de historietas son anárquicos."Igual estaba con mi mujer y otra pareja de vacaciones o pasando un fin de semana en algún hotel, y llegaba a casa y me ponía a dibujar en una noche lo de toda la semana". Como diciendo que los horarios de trabajos son ajenos a lo establecido o que hay días que no había manera de que saliera el dibujo, pero luego en poco rato, se obtenía el resultado, a base de "no dormir y de cafés".
Cuando pasas el tiempo dibujando para otros, piensas en cosas que tú harías de otra manera, o se te ocurren aventuras propias. Y presentas un proyecto a las editoriales. Si te lo aceptan, lo puedes llevar a cabo.
El dinero que previamente se ha ganado te permite comprar tiempo (un concepto sumamente interesante, que parece sacado de un libro sobre cómo ser un buen emprendedor: paso 1: ten dinero fresco).
Con el tiempo comprado, osea, que dejas de trabajar para otro y en vocabulario asalariado, "te comes tu paro", haces el guión y dibujas para tu proyecto de comic. Viene a ser el caso de
Los Mercenarios, una idea personal, presentada a los editores, que la compran, se la pagan, y la publican... "un proyecto propio te da poder sobre el mismo... y derechos de autor", aparte de poder desarrollar "tus propias ideas".
Evidentemente habla de otro contexto editorial y de la historieta. Y habla un dibujante que estuvo bien valorado (osea, que encontraba trabajo fácilmente) por la limpieza del trazo y la rapidez en dibujar y entregar.
¿Qué tipo de dibujo prefiere? El de
Los Mercenarios, el estilo más realista. El del
Capitán Pantera es más sencillo, dice, por oposición a
Hergé y los defensores de la linea clara que consideran que es más difícil porque es un esfuerzo de eliminación de líneas superflúas con el riesgo, digo yo, de equivocarse de línea. "
El Capitán Pantera también fue un proyecto presentado por mí", no un encargo. Se me pasó preguntarle por
Kala-Bacín de Damasco (revista
Zipi y Zape, 1982-1988). La verdad es que yo pensaba que se habia decidido por ese estilo porque estaba más cerca de sus intereses artísticos, ya en los años 80, implantado sólidamente en el medio y con mayor libertad creativa, pasada ya la época del cuaderno de aventuras, pasada la etapa de las Joyas Literarias (que en su etapa de ComicsBiografías también disponen de mayor libertad gráfica en el campo del estilo realista)
Y no tengo claro haberle preguntarlo por el anterior
Capitán Pantera, de los años 50 o 60, sobre si sería publicado por EDT o no. Pero me suena haberle oído decir que igual sí. A mí me gustaría verlo, compararlo con el otro y disfrutar de esas aventuras. Me sorprendí el día que leí que había habido otro Capitán Pantera anterior al que yo conocía. "Sobretodo es un heroe sonriente", recalcaba. En el Colección Olé también se incide en esa característica que yo asocio siempre al Capitán Trueno y sus amigos. Dice que no le gustan los héroes malhumorados o con el semblante enfadado.
Creo que es la única vez que he podido hacer mi pregunta: ¿cómo se documentaba? Porque ahora pones en Internet "sampán" (por seguir con el ejemplo) y te salen imágenes, o paras las imágenes de una película, o hay muchos más libros y en más sitios. Me dice: de ir al cine, de revistas de cine que había, de cine de aventuras, de piratas, de los mares del Sur, "los malos contra los buenos, sin mensajes políticos", na cosa que no sé cómo tomármela, porque yo veo mensajes de esos por todos lados. ¿El apoliticismo vinculado a la cultura popular asociada a no molestas ideas y propuestas de la cultura dominante, procedente de los grupos y clases dominanes? ¿Apolicitismo por haber vivido una gran etapa de la vida bajo el Franquismo, creador de súbditos y definido por la frase esquiva per falsa de Franco de "haga como yo y no se meta en política"? ¿Que no quiere que lo definan de ningun lado por si acaso?
Lo curioso es que en Los Mercenarios alguna vez los personajes malparados son los colonialistas (holandeses, ingleses) y, en otra ocasión, se le dice al niño indígena que tiene que formarse para tomar las riendas futuras del país, admitiéndose que el colonialismo no durará siempre y que el país tiene que pertenecer a sus habitantes y no a los invasores.
Me hizo buscar una página donde sale un barco... "pues ese barco está sacado de una foto de un libro (o de una revista) con pocas modificaciones". "Tengo libros de barcos" y de objetos de esa zona. Echo en falta en el tomo menos menciones a "las chicas" y alguna sobre el proceso de guión, dibujo y documentación.
Me habló de
Gora Gopal...
Es curioso. No callaba. Lo habitual es que los autores te larguen rápido, tengan o no tengan público. Eso lo he vivido incluso en fanzineros o autores noveles, cosa que me sorprende cuando uno interpreta que son un tipo de gente que viven en el sector de la comunicación y en un mundo donde las herramientas de la comunicación se han convertido en muy importantes utilizadas como marketing. El buen paño ya no se vende en el arca.
Me dolían los pies. Sudaba, para variar. Y me sabía mal irme, pero ya veía que tampoco entonces iba a acabar la primera vuelta completa. Entonces llegó un conocido suyo y se pusieron a hablar, y me fui.
Puede haber sido el momento más impactante que haya tenido en un Saló del Comic: tuve la oportunidad de hablar, normal, sin entrevista ni sin problemas de tiempo, con un gran dibujante, que ha hecho historietas que me encantan.
La firma me importa poco en general. Pero haber podido escuchar lo que dijo Carrillo fue emocionante.
Sobre si alguien se pregunta si di la vuelta completa... horas después retomé el reto. Consideré durante semanas que sí, pero un día me enteré de un sitio donde había un material curioso (no recuerdo lo que era): ¡pero no lo vi! Asi que me acabé saltando algun sitio.