20190502

Crispín por Enrich... ¡y Panchita de Schmidt!

Data Estel·lar dobleesres Dijous 20190502

Comentario de Realidad General: Mal, de verdad, mal.

Pasemos a los tebeos: en la revista Pulgarcito del año 1981-1984 tuvieron a bien sacar historietas de algún que otro personaje de Enrich. Supongo que también serían refritos con remontaje paginero, pero al personaje de Crispín lo ubico poco e. n otras revistas, así que estamos satisfechos.

Crispín, personaje de Enrich, y ¡Panchita!, personaje de Schmidt pero dibujada aquí por Enrich


Por otra parte, llevo todo el 2019 preguntándome si los refritos o "reediciones abusivas" pudieron tener varios motivos: 

1.-Amortizar al máximo el material ya fabricado.
2.-Ofrecer lectura de calidad a los lectores que no hubieran conocido tales dibujantes, series, guiones y personajes antaño.
3.-COLOREAR o publicar A TODO COLOR historietas que, años antes, habían sido editadas en bitono (o tricolor) o en blanco y negro. Efectivamente, las reediciones ochenteras nos permiten apreciar un agradable coloreado que no siempre existía anteriormente.

A Crispín... lo conozco tan poco y, como digo, no lo tengo apenas ubicado que HE TENIDO QUE BUSCAR POR INTERNET su nombre: "personajes de Enrich".  Ni su nombre ni su profesión ¿es vendedor? ni sus personajes secundarios, como un sobrino pequeño regordete él, parecen tener gran importancia.

Para mí, su gran personaje es Montse, la Amiga de los Animales, creada para la revista en catalán de número único llamada Jordi y que pasa casi coetáneamente a la revista Gina allá por 1978. Son esas historietas con una niña a la que le gustan los animales pero a su padre no, así que suele ser la víctima. Yo creo que Montse desciende mitocondrialmente de Roquita Veo Veo. Enseguida las historietas se simplifican: rondan demasiado sobre perros, el padre con camisa y corbata y trabajo de oficinista (ajeno a la realidad social del 80% de la población al estilo de la ficción hispana) y todo el rato por allí incordiando... la madre, desaparecida. Para la etapa final de las revistas, y ya en Ediciones B-Grupo Zeta, la veremos con un apartado cultural, a principios de los años 1990. Alguna curiosidad animal que acompaña a las historietas, y que mejora bastante el guión habitual.

Luego está Leoncio. Me gusta el nombre. Es atleta fuertote que va probando deportes pero, otra vez los guiones tienden a perderse en la búsqueda de trabajo para un fortachón.

Esa manía por el trabajo, por no trabajar, por ser vago, por cobrar, pagar, no poder cobrar, no querer pagar, la morosidad, las letras... cansa bastante en las historietas de la Editorial Bruguera. La idea precede a Vázquez, a sus anécdotas y a su serie del Tío Vázquez, entronca con la postguerra, con la comedia teatral típica y con el Lazarillo de Tormes y la novela picaresca (leedlo y nos contáis)... y deriva hasta más allá del final de manera agotadora y cansina. Un poco sí. Tanto cansa y pierde el sentido.

En el Territorio Francófono Europeo y en la Topolininia itálica, el problema es otro: todos son periodistas detectives.

La serie que se considera más recordada es El Caco Bonifacio, pero es porque los que han podido escribir son de décadas anteriores y llegaron al poder intelectual antes. Tuvo dos etapas, cuando menos, y encima la primera es en la mítica y mitificada Tio Vivo de los años 1950, así que, por obligación intelectualoide, es imprescindible y tiene que ser perfecta. Luego nadie lo lee y no nos lo pueden contar. Eran chistes sueltos mezclados con otros personajes, tipo El Profesor Tenebro. Yo diría. así de memoria. que al final Enrich, hacía casi toda la página. Otra cosa que tampoco voy a comprobar: aquí, haciéndome un nombre. 

La otra etapa del Caco Bonifacio, solamente me suena como contraportada en Superaventuras Trueno Color (que sea Jabato Color)... precisamente en una de esas revistas, también sale El Sheriff Chiquito que es Todo un Gallito, por Schmidt, así que hay algún que otro paralelismo entre ambos autores, al menos por la forma de publicarlos por parte de la editorial: en contraportadas de cabeceras hermanas.

Su otra gran serie no existe como tal, pero la considero principal: son la miríada de chistes de niños, de chicas con novio, de maridos y mujeres, y de todo tipo. Ahí sí que parece moverse como pez en el agua.

En una historieta aparece una mujer de la limpieza negra... no solamente eso sino que tiene un más que razonable parecido a Panchita, la coprotagonista de la serie Doctor Cataplasma

Pregunta: ¿acaso Enrich participó en alguna temporada en esa serie de Martz-Schmidt? De manera directa: ¿Fue Enrich un negro de Schmidt o lo suplió durante un tiempo suficiente como para considerar que ese personaje era también suyo? ¿Pudo entintarlo de manera continua? No tenemos datos. 

El caso es que esa mujer no es identificada como Panchita, lo que reduce la idea de que fuera un homenaje, un cameo sin más, a no ser que apareciera en una publicación extraordinaria con participación de un personaje de la serie A en la serie B, el de la B en la C... Si así fuera, a ver si me entero de qué revista pudo ser. No habríase visto preciso indicar el nombre del personaje de aparición fugaz, pero parece demasiado elaborado para la época, para los técnicos editoriales e incluso, sintiéndolo mucho, para los lectores.

Parece más lógico poner un "caramba, si es Panchita" o que se presentaran o que un cartucho de texto nos lo indicara. Toda esas opciones nos recuerdan a Escobar, por cierto. "Plano medio de Panchita, la criada del doctor Cataplasma, a punto de abrir la puerta". 

Nos gusta pensar que tooooodos los personajes viven en el mismo universo, así que nos gusta que Crispín se encuentre con Panchita

En parte, esto entraría en "¿cuántas etapas hay en Schmidt?" en el sentido de "¿cuántos cambios de estilo de dibujo y de guión hay en sus historietas?" Me gustaría saberlo pero me consta que es dificilillo cual acertar un euromillón.


Enrich: dibujante de trazo agradable.