Jaume Rovira: rey de los personajes invitados

Data Estel·lar glubs Dijous 20190214

Considero a Jaume Rovira como el rey de los personajes invitados.

En los años 1980 metía caricaturas y fotos tanto de personajes públicos, como políticos o cantantes, como de sus fotos convertidas en recurso cómico... y sospechamos que también ponía caricaturas de conocidos suyos. Esto lo sospecho porque solía realizar caricaturas de lectores en una sección de la revista Zipi y Zape, cuya característica era poner pecas. Cuando veo bastantes pecas en la cara de un individuo, generalmente hombre o mujer de aspecot juvenil y que pasea o traspasa sin más por la viñeta,  tiendo a pensar que estoy ante una caricatura de alguien que el dibujante conocía. 

Pero lo que más nos ha gustado siempre es descubrir a personajes de otras historietas.

 

Dudo que se lo podamos preguntar, pero me cuestiono si con eso quisiera decir que no era necesario meter historietas de guiones sosos, que gente como él, como Rovira, podía usar a esos personajes en un universo más amplio y rico, y manteniédoles su idiosincracia pero son idioCONgracia (y es otro juego de palabras brugueriano, como sospecharán). ¿Era un llamamiento a hacer más cosas con esos personajes? ¿Únicamente, que no es poco, era un homenaje? ¿Era el único dibujante que era fan de aquellos personajes, historietas y sentido del humor? Es que casi nadie más hacía eso, y es chulo que se hiciera, y hace gracia encontrarse a otros personajes de la casa.

Feliciano, personaje suertudo byVázquez por By Jaume Rovira.

Esas apariciones se convierten en comunes para no pocos personajes, sobretodo varios de Vázquez, de Ibáñez pero no es raro que sea Carpanta (de Escobar), etc, los que aparezcan. Creo que Rompetechos es el invitado más habitual y socorrido.

Rompetechos, algo alargado, de Ibáñez, dibujado por Rovira. Al ampliar se nota el coloreado que sobresale de la línea.

¿Ausencias? Claves: los Cinco Amiguetes nunca, que yo sepa, se encuentran con Aníbal, Ganímedes, Gemma o Calígula, que eran otros niños, pero dibujados por Roja$ de la Cámara, que jugaban en un descampado tras unas tapias urbanas. De cuando no estaba prohibido jugar a pelota en todos los sitios que no fueran sitios de pago vulgo clubs de fútbol: por cierto, que eso era para evitar "que cayeran en lah drogah" pero resulta que las drogas se venden como "suplemento alimenticio" en tiendas para deportistas. 

Los Cinco Amiguetes viven en la ciudad pero llegan al campo enseguida.

Segis y Olivio en la versión ochentera corriendo por el campo. Personajes de Jaume Rovira en esta ocasión dibujados por...

Es un campo, como el de casi todos los personajes bruguerianos y el de tantos reportajes de la tele, limpio, sin latas, sin botellas, sin cintas de cassette rotas, sin jeringuillas, sin neumáticos y sin lavadoras tiradas, sofás abandonados o somieres. Esos últimos datos nos sorprenden porque no salen ni en Segis y Olivo que son "traperos de alivio", pero que, viviendo en Catalunya, Sentmenat, habría visto que el somier es el gran elemento periurbano que identifica a urbanizaciones legales, ilegales, huertos de jubliados, solares abandondados, zonas de arbustos o de incipiente bosque.

... Jaume Rovira.

Cochear por Catalunya es introducirse en hipnóticas secuencias continuas que unen blocarrones de pisos, fábricas, granjas avícolas, supermercados y urbanizaciones con somieres. 

Ah, esa limpieza forma parte de la gran censura para la infancia, y para la cual no necesitaron nunca las empresas editoras ni los autores de ayer, hoy y de siempre, de arzobispados ni de secretarías generales para las buenas costumbres.

La Abuelita Paz by Vázquez dibujada por Rovira.

Por esos campos paseaban muchos personajes, entre ellos la Abuelita Paz y el lobo que le inserta Sanchis en su versión, o Gatín, o Anacleto o varios personajes de varios autores. Hay muchos caminantes campestres o periurbanos pero no los recordaré nunca a todos salvo a Trotamundo por Íñigo con guiones de Francisco Serrano o de Jesús de Cos...

Era cuestón de tiempo que algunos se cruzaran y que lo hicieran en Los Cinco Amiguetes de Jaume Rovira. Esta historieta supongo que fue publica hacia 1980 o 1981 en la revista Zipi y Zape pero desconozco el número. Fue reeditada, refrita y remontada en el Pulgarcito número 93 del año 1983, así, sin más datos, pero que calculamos que es de hacia finales de febrero o primeros de marzo de 1983.

La historieta va sin título. ¿Lo tenía en el original? Desconocemos la errónea razón por la cual Mercedes Blanco Abelaira, directora de la publicación, optaba siempre que podía por suprimir o no colocar títulos en las historietas, cosa que molesta casi tanto como la manía de quemar series a base de meter 18, 20 o más páginas en algunas de ellas: Tom y Jerry, Los Pitufos, etc. En la del gato y el ratón, acaban metiendo varias historietas pegadas, sin título siempre. No tenía gracia y sigue sin tenerla. Con Los Cinco Amiguetes harán lo mismo en estos números avanzados de esta revista, y encima lo hacen con historietas de enjundia como la aquí presentada que continúa con una de jugar a pistoleros, o con alguna de las de estilo aventurero que serían de las primeras de la serie: falta de respeto, oiga. Empacho y abuso.

El remontaje consiste en convertir una página de publicación original en 2. ¿Podrían haber optado por usar las medias páginas de las planchas originales de los originales? Poder, poder... es que ustedes lo quieren todo.

 

Aunque estos remontajes suelen llevar numerito, a partir de los números 70-80 de Pulgarcito, dejan de hacerlo. Los borrarían. Entiendo que estas historietas llevaron un numerito en la revista original y otra en el remontaje. Lo asevero porque hay alguna historieta publicada en más de un Pulgarcito y con numeritos distintos. 

¿Quién remontaba? ¿Por qué los numeritos en las páginas remontadas? ¿Eran dibujantes, técnicos editoriales, administrativos?

¿Se puede considerar esta versión de Los Cinco Amiguetes y la del Profesor Tragacanto en la misma publicación como el equivalente de una reedición o de unos números de Colección Olé que nunca existieron para desgracia de los lectorcetes? Pero ¿eso implicaría que cobraron derechos por nueva edición? Huy, huy, huy...

Agradecemos la cordial colaboración en esta historieta, de los señores Feliciano, Rompetechos, Segis y Olivio y de la abuelita Paz. Muchas gracias a todos. 

Así de educado acaba la historieta Jaume Rovira, a quien también le agradecemos historietas tan simpáticas como ésta.

P.d.: ¿realmente es tan malo que le den sopa al perro Pirata disfrazado de tigre?