El día neopolitano de Greenpeace

Data Estel·lar greenwantgreen Divendres 20181116

El marketing y el movimiento ecologista: no son conceptos que se repulsen, como sabrá cualquiera que haya hecho, nada, cuatro duros de comunicación política e institucional.

Lo llaman Neopolitan, que no es nada del otro jueves pero que se ve que nadie hace caso: que no esucies, que no manches, que seas responsable, que seas cívico, que no destroces el planeta.  Vamos, que si esto hay que decíroslo, pues es que el siglo XXI del futuro no era lo que nos habían dicho.

Como ya han aceptado y asumido que el consumismo es la ideología total, han optado por hablar de Consumo Responsable y dar pautas al respecto.

Estamos en las generaciones más antiecológicas, e incluso más militantemente antiecologistas de todas las existentes hasta ahora desde el inicio de la humanidad, pero igual algo llega. Sí, tú, cada vez que dices "un vuelo barato me lo pillo", pues eso.

Luego está que las presuntas autoridades públicas culpan al consumidor final que no ha pedido diez envoltorios donde dentro hay medio llavero. No he visto los huevos tan envueltos con cartón por debajo, plástico semirrígido por encima, plástico blando alrededor y encima que siempre te encuentres con uno roto. Lo de "vas a tirar la basura el día y la hora que a mí me convenga". La respuesta es: "ya, si he vuelto del trabajo y si no tengo que pasar a cuidar a mis ancianos, politicastro que por más que lo repitas no eres ni ecologista ni progresista sino un agente de ecoembes y otras mafias".

Relacionado en parte con eso han optado por plantar cara al Black Friday que, es curioso que con lo que cuesta que aprendáis cualquier cosa y eso lo aprendisteis el mismo 2015 cuando lo implantaron, y mira que no sabíais ni os ha importado nunca decir bien ni "he" en inglés que no se dice "e" ni "i" sino "ji". Pues eso: que aprendéis lo que os interesa pero no lo que os conviene.

Lo han denoninado Haz Cambio y tienen actividades en diversos sitios, básicamente Madrid, para arreglar, coser, montar ordenadores viejos y cosas de no malgastar, que sé que no os importa porque ahí no hay marcas ni manzanas ni precios caros que me hacéis creer que son baratos pero que es un poco más ecológico.