20231109

Vázquez y los Ángeles poco habladores

 Data Estel·lar angelosa Dijous 20231109

El historietista Vázquez tuvo, como mínimo a 3 personajes de nombre Ángel que hablaban poco o no hablaban. 

¿Conocía a alguien llamado Ángel y que fuera de pocas palabras?


1.-Don Ángel Siseñor, cuya expresión oral casi única era: "sí, señor". 6 viñetas de las que ocupan un tercio de la página, que se comenzaron a publicar hacia 1953. Insuperable e insuperado.

2.- Angelito se llamaba este nene, y nunca hablaba. Ángel, protagonista de una página de Vidas Ejemplares, Vidas Ejemplares, publicada en El DDT a partir del verano de 1957 al 1961 enque la serie pasa a Sanchis (sin ese título, pasa a Domènec hacia 1983 en contraportadas de revista Super Mortadelo y similares). El dato del origienel lo dado por el bloguero Granada XV en 20210923 en el artículo Vidas Ejemplares y otros ripios similares by Vázquez - EAGZA. Es aquella serie de biografías cómicas inventadas (porque tengo que decirlo todo) y con unos ripios, aleluyas, aucas o versitos en la parte inferior de cada viñeta. Originalmente, suelen ocupar 2/3 de la página con una columna para chistes.

 

No confundir con la versión de Editorial Novaro de México 19540501.

  
Reeditado y remontado para ocupar una página entera en Revista Superlópez, 11, 175 pesetas. Ediciones B-Grupo Zeta. 1987.




 El Miajilla también habla y pone imágenes de esta simpar serie.

3.-"Angelito" también conocido como Gu-Gú. El primer nombre va entrecomillado como si no se llamara así, y fuera el apelativo a un tierno bebé, un angelito, pero que es tremendo en ocasiones y eco-justiciero en otras. Su frase típica es "Gu-Gú", pero curiosamente, al tener ese título que no es el de su nombre, no lo entrecomillan cuando, claramente, no es su nombre propio. El de Angelito sí podría haberlo sido. Aparece por primera vez en Tio Vivo, número 170, 19640608, Editorial Bruguera.

Se trata de un bebé cabezón y sin pelo que recorre campos y descampados con algunas monomanías como buscar gusanitos, ver nubes, cruzar bosques con árboles misteriosos, pintar en tapias con puntas de lápiz o carboncillos mágicos, y enfrentarse a delincuentes en casos un tanto ecologistas en historietas de una páginas en los años 1960 en Editorial Bruguera  y de 2 páginas en Ediciones B-Grupo Zeta hacia 1987-1988.