20221213

Bruguera en Cuéntame

 Data Estel·lar digues-me Dimarts 20221213

Es un experimento... Estoy viendo varios episodios de Miént Cuéntame, famosa serie de TVE de la que se ha hablado tanto durante muchísimos años. 

Vamos a repasar algún momento que consideramos vinculado a la empresa Editorial Bruguera y algún que otro elemento ya directamente tebeístico.


 Hay algunos momentos que sospecho que son inspirados por Editorial Bruguera. En concreto... Como contamos continuamente en este blog, la empresa cierra en 1986. Se intenta montar una cooperativa. El precio de venta, sin embargo, será de 1 peseta simbólica y las deudas empresariales para una gran empresa como es el Grupo Zeta. En Cuéntame, mezclan ambas historias y las ambientan en 1974 o por ahí. El Grupo Zeta había sido la imprenta del padre de Antonio Asensio denominada Carmelo Asensio SA. Rondaba la idea de convertirla en una cooperativa, una tipo de propiedad empresarial cuyos propietarios son los trabajadores. Son tiempos en los que la palabra "autogestión obrera" aparece bastante, y supongo que la de "democracia económica", también. Creo recordar haber leído que ese experimento social-empresarial incluso se llevó a la práctica, mientras Antonio Asensio montaba del todo el Grupo Zeta con revistas. La imprenta Gráficas Hermanos Usillos que será vendida por los Usillos a Paulino y Antonio como socios cooperativistas, así pues, convertida en cooperativa por 1 peseta y las deudas acumuladas en la sociedad limitada a un propietario Alcántara Rotopress pasará a ser una editorial de la revista política Por Supuesto que podríamos ver como un remedo de Intervíú, fundada en 1976 que fue la primera revista, y de más éxito, del Grupo Zeta. Las fechas cuadran entre 1974-1976 para el Grupo Zeta y la situación cuadra con la quiebra técnica de la Editorial Bruguera en 1985-1986. La revista de la serie de televisión es un fracaso, en tanto que la real será un éxito y durará hasta 2018.


Ver esa serie, más allá de momentos fugaces que me dijeron lo que sigo comprobando (tiene más de fraude que de reflejo social y ahora compruebo que es un culebrón más que una serie) es un reto, un experimento, un ejercicio. los guiones y la producción son la habitual: cuatro ideas que se repiten sin parar. Decir que reflejan la realidad social para pararse en elementos de 30 o 40 años después como si fueran normales socialemente, asumibles culturalmente y asimilables sin más en gentes de los años 1960-1990. Olvidar la existencia de clases asalariadas. No hay nadie que tenga protagonismo que sea un obrero sin más... ni los de la imprenta, que son fantasmas. Solamente al convertirse en empresarios cooperativas, o ser un obrero con carnet de un sindicato y luego directivo tienen papel. Antonio Alcántara gime cuando ve un futuro en el que su hijo en 1983 será conserge de un ministerio (como él mismo lo fue): ¡llora porque su hijo tendrá un puesto de funcionario con sueldo seguro, fácil acceso en transporte público y privado y derechos laborales de verdad, sin despidos traicionarios a la vuelta de vacaciones ni reconversión industrial! La lejanía con las condiciones sociales reales de Cuéntame con las de la España y sospecho que el Madrid real son tremendas. Por supuesto, NO es Barcelona. Y la riqueza que se atisva en el pueblo de Sagrillas en los años 1970 no tiene nada que ver con la pobreza que se ha visto en los pueblos hasta más allá de los Fondos de Cohesión de la Comunidad Económica Europea en 1992. No es una zanja sino la Gran Falla de África en cuanto a distancia con cualquier realidad, salvo la que bohemios burgueses han tenido siempre a su alcance. Tienen protagonismo el dueño de la tienda de electrodomésticos, Desi, que también fue callista (osea que trabajaba por su cuenta y con primos y familiares que le prestan de todo en los años 1960 tenían dinero aunque no aparecen por la boda, porque la empresa TVE se ahorra la calidad de la serie aunque despilfarra nuestro dinero de los impuestos), el dueño del bar y luego el del restaurante (el hermano, quien se considera hasta 1978, como "pobre" pese a ser el dueño de un restaurante que sirve menús). El tercero es Antonio Alcántara, quien es empresario de imprenta (cooperativista y luego dueño capitalista total) para pasar a ser director de un organismo ministerial, un cargo de confianza política, de cobrar muchísimo... eso años después de que la madre tenga una peluquería que cambia por una tienda de ropa en menos que los chinos cambian una tienda de restaurante a bazar, para reconvertirla otra vez en peluquería... eso son materiales, sillas, secadores, prendas de ropa, mostradores, un dineral... etcétera. Podemos seguir con más personajes. 


Hay algunos actores que lo hacen bastante bien. Las dos abuelas. La que mataron rápidamente era perfecta. La otra pone esas caras y miradas matadoras de abuela y suegra.

Don Pablo Ramírez Sañudo... actor perfecto el tal Pepe Sancho. Lástima la poca cabeza de los mandamases y los productores de RTVE para no vincular las diferentes serie. Don Pablo podría ser descendiente de El Estudiante de la serie setentera Curro Jiménez. No afecta en nada a ninguna de las series pero aumenta la continuidad y la coherencia transficcional. Si vemos la evolución de sagas de ultraderechistas de reconocido prestigio de los siglox XX y XXI veríamos a verdaderos ilustres antepasados liberales del siglo XIX. Eso pasa con los militares de apellidos famosos, por ejemplo. Es cuestión de leerse una enciclopedia... ay, no que eso de leer y encima libros y encima enciclopedias está muy mal visto... Curiosamente,  Antonio Alcántara sí que lee tomos de la enciclopedia. En el mundo real he conocido a alguien que también contaba que lo había hecho... la letra C... 

Los niños pequeños...

Lástima que los personajes no vean esas serie. 

Uno de los hijos es abogado... lo ideal, pero seguro que no pasará, es que acabe trabajando o buscando trabajo o vinculado a los abogados de Anillos de Oro (serie de hacia 1983, cuyo protagonista es Imanol Arias, en lo que fue un gran regalo porque aparece muy pero que muy poco y se hizo muy pero que muy famoso. Si no como abogado, como cliente o como contraparte en un juicio... de alguna manera, dado que todos están en trámites de separación y divorcio sin cesar ¡en la España sesentera y setentera sin atisbos de  ley de divorcio! O que vieran la serie en la tele... y dijeran si el actor es guapo o no. Lo típico... pero con la guasa de que es el mismo Antonio Alcántara

En fin, cosas que enriquecen de verdad la ficción de RTVE.

... que, por otra parte, como todos los guiones españoles son escasos. Sucede exactamente lo mismo que en Amar es Para Siempre y que La Que Se Avecina. El cura que se casa o que se va con una feligresa es muy típico. El robo de ropa en tiendas por parte de gente con dinero ha sido el motor de un gran cambio en Los Cuquis de La Que se Avecina

Para 1978, lo que debe Amar es Para Siempre (copiado) de Cuéntame es extremo: en ambas series pasan de 1974 a 1978 por la fase de que los mismos personajes o el mismo escenario sea una revista política con aparición de revista ilustrada de humor satírico tipo El Jueves entre tantas que había en los años 1970, para pasar a un bufete de abogados. En Cuéntame, el mismo hijo de Antonio Alcántara y Merche Fernández, Toni, hace de periodista y de abogado. En Amar es Para Siempre, ya lo contamos, hubo un actor que era la imagen de Peñarroya. No creo en esas coincidencias porque la serie de Amar es Para Siempre se basaba en ideas del lector de tebeos Josep Maria Bernet i Jornet, así que hizo algo más y mejor aparte de ser el que tristemente introdujo el culebrot en TV3 con sus Poblenou, Ventdelpla y demás y luego Amar en Tiempos Revueltos en TVE rebautizada como Amar es Para Siempre en Antena3.

Por lo demás, hay demasiados préstamos de peliculas de Paco Martínez Soria y otras. No diré porque lo desconozco que aquellos guiones de las películas fueran originales pero, al ser anteriores y tan repetidos en emisiones televisivas ¡qué menos que esperar que nadie se los apropie para volver a cobrarlos, guionistas, actores y productores con contratos públicos del dinero de los contribuyentes españoles!

Hay que Educar a Papá... de Paco Martínez Soria aparece cuando se van al piso caro... a su vez la idea es tan vieja como las tiras de prensa USA: Bringing Up Father de Georges Mc Manus, de excelente dibujo de línea clara, que fue traducida al castellano como ¡ Educando a Papá! La idea del tipo entre de pueblo y pobre que acaba en el barrio rico de la ciudad y con ricos. 

El estilo de La Familia Ulises, de Benejam en los dibujos y Buigas en los guiones se nota mucho... no tanto por lo que pensará alguno: porque la familia va siempre junta. No es así: la familia Alcántara es totalmente disfuncional. La madre y el padre tienen abandonados a los hijos desde los años 1960 y solamente se acuerdan de ellos cuando los llaman de la cárcel en la que suelen estar encerrados, por cierto, bastante semejante a Amar es Para Siempre... y también sospecho que la hija está metida en drogas; es decir, en ambas series es la HIJA la que se mete en drogas. En ambas series, el hijo pequeño se mete de voluntario en la mili. Además, una mili siempre de enchufe, en ambos hijos de Alcántara: hacen la mili en Madrid. No los llevan ni a Salamanca ni a Canarias ni a Melilla. 

La similitud con La Familia Ulises la veo más bien como esos episodios bochornosos que les suceden, de líos por quedar bien con una sociedad de buen parné a la que quieren parecerse y penetrar, o intentando lidar con las costumbres de todo tipo. Creo que no es casual esa semejanza.

A lo largo de la serie, sobretodo, durante los años 1960 y primeros 1970, cuando aparece el kioskero Cervan, se repasan algunos teboes, El kioskero los vende como si fuera de verdad: sin interés, sin conocer bien, más allá que son monitos, personajes, estampitas o animalitos que pueden ir de un tema o de otro, según les piden los niños que se acercan al kiosko, nunca niñas. Eso sí, con más gracia que el resto de vendedores de tebeos que uno se haya tenido que encontrar en la vida. Lo qué é é, citando una cita clásica.

Luego se habla de alguna revista satírica, a mediados de los años 1970. 

Como pasa con Amar en Tiempos Revueltos y Amar es Para Siempre, no intenten que los guionistas y atrezzistas y documentalistas (una lista inmensa de gente que cobra de sus impuestos) hayan optado por documentarse y poner los tebeos según la época que toca. Nada de eso. Por ejemplo, la época fuerte de Mortadelo y Filemón ya no aparece reflejada, la Colección Olé y las revistas Mortadelo de los años 1970. El Capitán Trueno, mezclando etapas, fácil de localizar por formatos y precios, aparece mezclada. De donde no hay no se puede sacar... pero veo que sí que pueden meter: dinero en su saca. 

No es un caso aislado porque los fenómenos y acontecimientos sociales aparecen descontextualizados, algunos son de los años 1980 en los años 1960 o directamente son de los años 2010 y en consonancia con los intereses de los partidos políticos e ideólogos de principios del siglo XXI y no con lo que realmente sucede o interesaba o era aceptable en los años 1960, 1970 o incluso 1980 y 1990. El caso de la homosexualidad es un ejemplo máximo pero hay tantísimos que cuesta creer que series así sean aceptadas y obtengan premios sin parar.