Anuncio de Monstruos&Co

Data Estel·lar Intrigant Dimarts 20171208

En varias revistas, como en el Pulgarcito número 25 de junio de 1986 de donde extraemos la amarilleada imagen que tenéis la suerte de no poder oler (la humedad venía de serie cuando la compré), se publicitó la revista Monstruos&Co.

Tebeosfera considera que solamente salió un número, y que fue publicada por Editorial Bruguera... para mí no salió ningún número, puesto que aún no he podido tocar ninguno.

A mí me recuerda a aquellos caramelos que se pusieron de moda como diez o incluso quince años después, sobre cosas desagradables.

Por tanto, esta revista se adelantó a modas similares.

Me tengo que creer que es una publicación de Bruguera pero siempre he pensado que era directamente un anuncio a la desesperada de otra editorial, en concreto, de CGE, la Compañía General de Ediciones que publicó la revista Garibolo. Vamos, lo tenía clarísimo hasta que consulté la Tebeosfera. De hecho, siempre que veo el anuncio pienso en la sucesora, que lo es (lo dice Tebeosfera): la revista Bichos. No me pregunten: solamente he visto algún número suelto y algún retapado sin tapas interiores y mohoso.

Cuaderno grapado de 36 páginas a color. Contiene poster central. Debido al cierre de la Editorial Bruguera, solo apareció el nº1.
Las series continuarían en la colección Bichos.

Algo raro eso de que una editorial anuncie lo de otra... pero si hay ingresos por publicidad y tu editorial está a punto de desvanecerse en la nada, ¿por qué no? Aunque la opción que barajaba era la de que la imprenta era la que tenía interés en publicitar algo para seguir cobrando los sueldos. De hecho, no descarto en absoluto dicha opción.

Los dibujos, claramente, me recuerdan a ciertas páginas de los primerísimos números de otra revista Pulgarcito, la de Ediciones B-Grupo Zeta, la de Pío Sidral, Mercenario Sideral, por Jaime Martín, o incluso, cosas que me caen por la cabeza la sección de trazo tan limpio y TBOtiano, Oficios Humanos Trabajos Mundanos. O de otras cosas.

Lástima que pararan lo de Pio Sidral. A continuación sabremos por qué.

Del enlace anterior, extraigo un par de datos sobre Jaime Martín, los datos que nos interesan y por los cuales no se dan premios de divulgación ni premios sobre dibujo de historietas y aquí estamos en contra de esa actitud: 

1986/1987. Revista Bichos, Cía. General de Ediciones (semanal). Colaboración desde el nº1 de la revista. Hacía las historias del Sustón (uno de los personajes fijos de la revista). También historias sueltas, páginas de chistes y las tiras de Simplonato (un personaje de mente simple como el mecanismo de un botijo, inspirado en un conocido). Todo a "color indicado", no se podía colorear uno mismo.

1987. Revista Pulgarcito, Ediciones B (semanal):

Colaboración desde el nº 1 al 7. Dibujaba la serie Pio Sidral, mercenario sideral”. Me dio por hacer una especie de Han Solo pero bastante chapucero (además era insumiso, lo buscaba la PM para hacer la mili). Cuando me enteré que no pensaban devolverme los originales dejé de colaborar. Recuperé mis páginas después de mucho teléfono y visitas a la editorial.

 Bueno, pues acabamos de aprender demasiado sobre Ediciones B-Grupo Zeta. Eso explica muchas cosas.

Uf. Esto es duro. Léalo a su riesgo:

1997/1998. Colaboración con SAV (distribuidora de vídeo) como ilustrador y diseñador.

 SAV es como un monopolio que legitima con su mal hacer el pirateo: cintas de vídeo de Cousteau y tal que se veían movidas o DVDs con episodios que no se pueden ver. Ah, pero los has pagado con sangre. Eso es SAV entre los años 1990 y 2017.

Vamos a hacer amigos: no me gustaba demasiado ese estilo de dibujo, pero lo prefiero a la evolución posterior. Es que estoy viendo algunas imágenes en uiardejapis y... bueno, para decirlo sin embudos: comercial que no parece comercial, que sigue modas (venga, Altarriba con Arrugas; ahora niños de ojos punto en ciudades ordenadas y limpias, y antes barrios sucios con jeringuillas, sin solución de continuidad) como si fuera personal... en fin, lo que veo en demasiados, demasiados autores españoles profesionales y pre-profesionales y aficionados.