Extra de Lily y Emma

Data Estel·lar finiquitrántrántrán Dilluns 20140203

Generalmente, la crítica se ha olvidado de la importancia del tebeo para niñas, comic femenino, comic en femení (como lo denominó una serie de actos en Barcelona).

Se puede hablar sobre muchas cosas. Sobre su calidad o falta de ella. Sobre la renovación del público pero la continuidad de contenidos, a veces con los mismos personajes en forma de refritangas continuas (cosa que pasa en Bruguera durante los años 70 y 80), con las mismas historias pero protagonizadas por diferentes personajes (caso de los Claro de Luna y demás historietas románticas de los años 50-70) o con un barniz exótico o con elementos más modernos, como es el caso del shojo manga, que abunda y reproduce el mismo tema de la princesa que busca un príncipe azul pero alargado una decena larga de tomos, y que ha tenido éxito en España desde los años 90 (por no decir, desde Candy, Candy en TVE en 1984 y en revistas femenina Bruguera de la misma época, y en color... que el que quiera lo critique pero queda mil veces mejor que el manga descolorido). La misma historieta, con parámetros sociales cerrados, con roles muy marcados y rígidos para la mujer y el hombre, y un ambiente siempre de clase "benestant", que no trabajan nunca en la obra ni limpiando casas, vamos. En el subgénero procedente de las Islas Británicas (IPC, Syndication Internacional...) se une el sensiblerismo de origen melodramático y dickensiano con niñas pobres que lloran mucho y sufren mucho pero que son de familia rica o que llegaran a ricas y felices en el futuro.

El favor del público lo obtuvo con creces durante décadas

Además, como hemos podido ver en toda la serie maginotécnica de "Bruguera anuncia Bruguera", resulta que Editorial Bruguera no descuida nunca la promoción de sus revistas femeninas durante los años 80.

Ay, qué risa, Basilisa. ¿Recordáis el Windows 7? Fue el sucesor del Windows XP. Pues es una de tantas chapuzas que luchan con éxito contra el  que sabe informática a nivel usuario. 

Resulta que los archivos de las imágenes del Windows XP tienen un apartado de Propiedades en los cuales uno escribía el dato de la revista... pues resulta que el Windows 7 no lo tiene, y elimina o esconde manera fatal el esfuerzo realizado con cuidado. Gracias por nada, monopolio Microsoft, y así se hundan ustedes en el infierno junto a sus colegas de Macintosh. Y no hemos hablado de esa estafa llamada Cleartype. El que pueda, que evite el Windows 7 y el Windows 8.

En los años 80, Bruguera intenta una renovación conceptual. Por ejemplo, con Emma es Encantadora: es una chica que parece Esther... ya me pueden decir que la dibujanta es Trini Trinturé pero, a ver qué piensan ustedes. El guionista es Andreu Martín. Y son una familia de abuela, madre y nieta brujas de la Edad Moderna que acaban en la época actual. Evidentemente, el argumento es pelín distinto de lo habitual. Nadie puede decir que estuviera desfasado cuando 15 años después tenía éxito en la tele una serie como Sabrina Cosas de Brujas, basada en comics de la familia Archie (en 1988-1989, TVE emitió la serie de animación Mis Queridos Monstruos con estos personajes dando vueltas por ahí). 

Lección que no vais a aprender: las cosas no pasan de moda. Es el prescriptor el que decide lo que está de moda.

En el modernistódromo brugueril llegan a ponerse muy pesados con Michael Jackson. Para el que no sepa de lo que hablo, la propaganda estadounidense de decirnos lo molonguis que son por allí -vulgo aculturización- sacaba cada día a Madonna (me pregunto si es tan repugnante como parece), un tal George Michael y a Michael Jackson y a algún otro, continuamente en la tele, en los videoclips, en cromos, en carpetas, en todos lados. Fue una época muy pelmaza de la que no salió nada bueno: arrastró como una riada lo que quedaba de cultura popular y atontó bastante más a la población infantil, adolescente y juvenil con vistas a un futuro de burbuja inmobiliaria, fútbol y más fútbol, de "los moros se llevan las ayudas" y no voy a seguir porque aún me contengo pero dentro de nada ya entraré en otro futuro y me dará igual todo. 

En Bruguera llegaron a regalar el guante de Michael Jackson... puaj, repuaj, skup... berg... eso fue en el número 100 de la revista Esther, un número olvidable del que igual hablaremos en alguna ocasión.

Por las mismas épocas, el Extra Lily anunciaba que sacaría un poster de este famoso cantante, que aún no era tan blanco como lo sería cuando ganara más dinero (antes de fallecer, claro) y sobre lo que hubo mucha polémica sobre si era enfermedad o si era tontería quirúrgica. Los negros se descoloren con el dinero. Es muy raro. Ved a ese engendro que va de gracioso y de actor de acción: Will Smith. Sí, el que destruyó la serie sesentera Jim West, la de Don Miguelito. Gracias, Canal 33, pues hubo una época en la que servías para algo. O a cualquier otro. Cuanto más pobres son, más negros son. De ahí infiero que por eso las castas altas suelen ser más bien rubias. Hasta ahora lo atribuía a que, por acumulación secular de la riqueza, procedían de los pueblos germánicos (visigodos, alanos, etc.) pero igual hay algo místico.

¿Existe una cantidad tal de dinero que haga a alguien invisible? Hombre, a efectos judiciales y fiscales, sí.

No es ninguna gran noticia porque la revista Lily se dedicaba básicamente a anunciar posters en sus portadas desde los años 70, con alguna referencia a la vida de los cantantes o a si eran guapos (que es lo más importante para quien se dedique al mundo de la música) o la letra de alguna canción. Así que publicar un poster, otro más, de un famoso y rico cantante, no es que fuera la exclusiva del siglo, la verdad.

Lo memorable es que es anunciado el poster, sin referencia a los comics, que son tres cuartas partes de una revista que incluye recetas de cocina, ejercicios aeróbicos, tests, horóscopos y esas cosas que se ve que resultan fundamentales para una lectora, niña, adolescente, joven, y que se repite en todas las revistas hasta llegar al Pronto.

Se anuncia como EXTRA DE LILY, no como Lily Extra que es lo que muchos leemos. No está de más recordar un descubrimiento de latiacomforo: la revista es Extra o Extra de y se le añade el título de cada cabercera de la editorial. Así, el número de la revista que aparece en un circulito de la contraportada en su parte superior derecha, hace referencia al número total de los Extras. Eso es así, al menos durante los años 80. Quiero decir que si alguien viera el Extra de Zipi y Zape 45 que no busque los 44 anteriores, porque igual el 44 es el de Lily, el 43 es de Mortadelo, el 42 es de Tio Vivo, etc. 

La mitad inferior tiene una historieta de Nero, por Jordi Buxadé (je, por lo normal, leer su firmano lo hace ni el que revisó las libretas del corrupto Bárcenas). Es un niño que protagoniza chistes unitarios o historietas de media página, generalmente mudas o de pocas palabras, y siempre en un entorno del Oeste, que a veces parece más actual y otras más del siglo XIX (del Oeste-Oeste de verdad).