Data Estel·lar ce ça Felici Dijous 20140529
Por si alguien no se ha enterado, y aquí la plana mayor de la maginoteca, entre ellos, ya ha habido Elecciones para el Parlamento Europeo.
La mayoría de decisiones proceden de Europa, de la Unión Europea, en base a unos tratados y acuerdos intergubernamentales sobre los que sólo nos preguntaron una vez y luego se desdijeron de habernos consultado con la preguntita "¿Aprueba usted el Tratado por el que se establece una Constitución para Europa?" Como en Francia y algún otro sitio salió que NO, pues le cambiaron el nombre y a la Constitución Europea la llamaron Tratado de Lisboa, y se acabó tanta democracia y tanta tontería, porque los europeos están tan mal acostumbrados a vivir bien que ni responder lo que toca saben. Siempre hay que recordar que, durante aquel 2005, Josep Borrell, quien había sido Presidente del Parlamento Europeo tras haber autodestruido su liderazgo en el PSOE como alternativa a Aznar, demostró otra vez que no era tan inteligente como nos lo habían vendido, y sí bastante más amante de la opacidad, y por tanto, de la falta de democracia: no hay que leerse la Constitución, decía, insistiendo en que mejor no leérsela, que él ya lo había hecho y era un tostón pero que acaba bien, y que si él decía que estaba bien, pues que ya está, que a votar que sí.
Fue tanto el consenso "entre los dos grandes partidos" como suelen repetir los tertuliano-voceros que en sitios como Sabadell, el ayuntamiento (del PSC) dijo que todos los locales públicos (no hay tantos) estaban ocupados por actos electorales y debates inexistentes, en lo que se sospechó otra maniobra para impedir actos contrarios a aquel referéndum, cuyo espíritu era que el elector diga aménjesús sin saber a qué. Así que otras conferencias de peregrina temática, mesas redondas o charlas fueron traspasadas de fecha o de lugar, a sitios muy pintorescos, como una pequeña sala del Museu d'Història. Ay, la gestión del conflicto lo compleja que es.
Pero todo aquello de la Constitución y de Lisboa abrió una pequeña brecha para que el Parlamento Europeo (no le llaméis Europarlamento, que, huy, que se enfadan y no queremos que sufran, ¿verdad?) aumentara su poder.
El Parlamento Europeo no tiene un verdadero poder legislativo. Es más un parlamento feudal y consultivo que uno democrático. Aunque tiene unos 700 diputados, no son muchos, porque son apenas el doble que los del Congreso de los Diputados, o una 6 veces el Parlament de Catalunya, así que cada diputado representa estadísticamente a menos cantidad de ciudadanos europeos que sus homólogos de menor rango territorial.
Pero ha tenido una especie de virtud, la de tener presidentes de Parlamento que se hacen eco de la necesidad de democratizar la institución y, linealmente, democratizar una Unión Europea que, es de sobras conocido, no cumple los requisitos mínimos de democracia para acceder como miembro
Fuentes:
http://resultados2014.interior.es/99PE/DPE99999TO.htm
http://www.infoelectoral.mir.es/min/busquedaAvanzadaAction.html?codTipoEleccion=1&vuelta=1&isHome=1&codPeriodo=200502
http://www.gesop.net/ca/blog/item/161-breu-de-dades-els-resultats-del-25-m
Voy a comenzar por el Gesop. Nada más iniciar su lectura ya tenemos un dato sumamente interesante: los votos sin representación que incluyen a votos a partidos sin representación y al voto en blanco y nulo han pasado de 879688 en las pasadas Elecciones Europeas 2009 a un millón más en las Elecciones Europeas 2014: 1826326. Del 2.5% al 5.3% del total de un censo electoral en el cual no ha votado ni la mitad.
Es decir, con una menor abstención, puesto que se ha reducido en 746666 el número de abstencionistas, resulta que hay 946638 más de votos sin representación.
Nada más ver esto tenemos una primera sensación que se repetirá cada vez que uno eche un vistazo a montones de poblaciones, comunidades autónomas o a la circunscripción electoral única de España: el voto se ha dispersado.
Realmente parece que la propuesta de los Indignados del 15M cuando pedían votar a partidos pequeños para romper el bipartidismo (PP-PSOE, CiU-PSC, CiU-ERC) ha dado resultados cuatro años después. Entendemos por ese bipartidismo la existencia de dos partidos predominantes en el sistema que son alternativa única el uno del otro, o que no se puede formar una coalición de gobierno sin la preeminente y aplastante presencia de uno de ellos, y que aparecen como contrarios en cuestiones cosméticas (uno de azul y el otro de rojo) pero con una simpar igualdad en cuestiones estructurales, es decir, en la defensa y ampliación del nuevo orden neoliberal, con ventajismo a favor de los poderosos y con revanchismo contra los débiles, aplicando recetas del Fondo Monetario Internacional (¿socialista Christine Lagarde?) impulsadas por la Comisión Europea (¿socialista Joaquín Almunia?), por el Banco Central Europeo (Mario Monti, aquí, sí, porque es del partido Golmand Sachs) y por la derechista Angela Merkel (¿demo?¿cristiana?).
Habiendo votado poca gente, lo que primero es relevante es comprobar la dispersión de voto, para luego comprobar el aumento de partidos pequeños, de partidos nuevos y de partidos que obtienen alguna representación o casi que la obtienen, con varios centenares de miles de votos.
Si bien el PP y el PSOE tienen una gran amplitud porcentual y en votos absolutos con respecto a los demás partidos, juntos llegan apenas al 50% de los votos.
A grandes rasgos, ambos obtienen unos 7 millones de votos. Ha habido una abstención inmensa, y la mitad no fue a votar. ¿Hay que duplicar sus votos más proporcionalmente si la participación llegase al 60 o 70%?
El panorama es totalmente distinto de las anteriores Elecciones Europeas 2009: entonces el PP ganaba sobradamente con un 42% de los votos y el PSOE obtenía el 38%, cada uno de ellos con más de 6 millones de votos.
La abstención era similar: un 55.1% (19567420 abstencionistas) en el 2009 frente a un 54.16% (18810754 abstencionistas) en el 2014. Más similar, imposible.
Por lo tanto, es evidente y clara la caída del voto a los dos partidos hasta ahora hegemónicos e intercambiables en el gobierno y en las políticas económicas y decisiones públicas.
Pese a que CEU (Coalición por EUropa: CiU, PNV, CC, CXG) se mantiene, en unos 800000 votos, y su porcentaje se mantiene alrededor del 5%. Es difícil encontrar algo más parecido entre dos elecciones.
IU-ICV triplica sus votos: de 588248 a 1562567. Un millón más. De un 3.71% a un 9.99% del total de votos válidos.
UPD duplica sus votos y pasa de 451866 a 1015994. Medio míllón más de votos. De un 2% a un 6.5% del total de votos. Pasa a ser de manera clara una cuarta fuerza. El nacionalismo españolista escala elección tras elección. Tengamos en cuenta el apoyo mediático que durante años ha recibido de prensa escrita pero sobretodo del agit-prop ultraderechista de 10TV, Intereconomía i 13TV (los mismos...).
La sorpresa ha sido Podemos, según la prensa. Pero son parciales: es la sorpresa, en parte porque es uno de ellos, Pablo Iglesias, presentador de la tele. Ha obtenido, en su primera contienda electoral: 1245948 votos, es decir, un 7.97% de los sufragios válidos.
En el espectro nacionalista e independentista, EPD, que es la coalición dentro de la cual iba ERC, ha doblado también sus votos: de 394938 a 629071. Nada raro, si nos atenemos a la tesis principal de este artículo: ganan más los que más salen en la tele, y que además no estén en el gobierno.. La presencia mediática gigantesca de ERC, o de sus postulados y sus defensores y voceros, o de voceros de CiU que un elector puede interpretar más bien de ERC. Tras las Elecciones, CiU intensifica los cantos de sirena para no quemarse sola en el gobierno y pide a ERC que entre en coalición. Lógicamente, ERC, que vota todas las politicas de derechas, derecha dura y ultraderecha que le pide CiU, no quiere quemarse antes de llegar. Eso sí, lo vende Oriol Junqueras, en algo que suena mucho al folleto de ventas de CiU desde Jordi Pujol, que lo que desean es que gane Catalunya, no ERC. Esperamos infructuosamente ese cambio de nombre a DRC (Dreta Republicana de Catalunya).
Excepto IU, los demás partidos que aumentan tanto sus votos han recibido un fuerte apoyo mediático incansable y diario durante meses o años. En unos casos, sus candidatos han sido tertulianos, presentadores, periodistas o todo ello junto (si es creíble), y en otros han tenido prensa afín, y teles afines. No era raro que cada día saliese alguien de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía en alguna tertulia: Jordi Cañas sería el más mediático, cáustico y hasta cierto informado e informante de cosas que otros callaban hasta su ¿temporal? defenestración por una denuncia de fraude fiscal (ah, lo de siempre, y eso que no son todos iguales... hablan de quinientos mil euros como si fuera lo más normal del mundo). Pero Girauta también estaba por todos lados. Tertulias en Canal Català o en Badalona Televisio o en Intereconmía. Por cierto, lo que ladraba Cañas en el programa del cura compensaba lo modosito que estaba en el programa del gato vampiro.
Su gran figura eurocandidata ha sido Javier Nart. Quien no lo conozca lleva como 30 años sin ver la tele. Desde el programa de debate Tribunal Popular, cuando hacía de acusador mientras Ricard Fernández-Deu, con su insufrible cara de buena persona, defendía lo indefendible.Este último pasó luego por cargos del PP catalán y, aproximadamente, desde el 2010, analiza elecciones junto a un grupo de gente que debería ser de politólogos pero que suelen ser más bien tertulianos parapolíticos. Eso sí, el grupete lo amansa el politólogo Joan Botella.
Nart es un habitual de las tertulias de Intereconomía, el canal de la ultraderecha que conocía el valor del espectáculo. La 13TV está dirigido más como la clásica ultraderecha: cuadrados sin fisuras atisbando la llegada de alguien que, enviado por Dios, salve la Patria, pese a todos los pecados que le hemos infringido, y acaudille, bigote al viento, las ansias de una, estimable y justificable, grandeza imperial.
Pero resulta que el Grupo Planeta también tenía sus canales de tele. Y en uno vieron un filón desaprovechado, y es donde más o menos pusieron una tertulia "del otro lado", la de la Pablo Iglesias.
Lógicamente, el vocero habitual en canales públicos y privados de la derecha extrema pero de guante de seda, Alfonso Rojo, se opone frontalmente a Pablo Iglesias.A Alfonso Rojo le hemos oído tirar por la borda varis cientos de miles de euros de emisión de radio pública en Las Mañanas de RNE-1, mientras hablaba sobre cascos de bicicletas en días en los que había uno o dos temas mucho más urgentes, pero tambien más lesivos para el Partido Popular. También le escuchamos alguna frase, todo en el 2013-2014, sobre que ellos sabían lo que pasaba en Venezuela porque habían sido invitados varias veces y habían ido parece que entre turismo y periodismo (lo que denominan así)... y resulta que nunca habían explicado nada de eso. Por ejemplo, ¿qué empresa transnacional española le pagaba los viajes?
http://www.publico.es/politica/526750/el-partido-x-denuncia-irregularidades-en-el-proceso-electoral-tras-su-fracaso-el-25-m
http://partidox.org/2014-viaje-tripas-sistema-electoral/
El voto emigrante vuelve a ser impedido.
http://www.publico.es/politica/522600/aunque-me-presente-en-el-consulado-este-domingo-con-una-papeleta-no-podria-votar
La conclusión extrema es que la televisión sigue siendo el medio básico por el cual el elector decide su voto.
Internet queda un tanto orillado, pese a su creciente poder, como un lugar aún (¿siempre?) demasiado especializado.
Si nos fijamos en el mundo del guasapeo y los vídeos de los esmártfons (si acentúas "cómic" y usas anglicismos, chitón), siempre se hacen referencia a programas de la tele, sea el del Follonero o sea algun video curioso de otro programa. Se hacen virales mediante internet, y también hay muchos propios del medio, pero una proporción no desdeñable son cosas de la tele, como siempre, como en esa radio y esa tele que necesistan repetir lo emitido por la tele.
Ahora bien, partidos del voto en blanco, el mismo voto en blanco, o candidaturas más pequeñas tienen un creciente número de votos: hay muchos partidos con más de cien de los mismos y que no han accedido al Parlamento Europeo. Más difícil entrar en el Congreso, donde hay barrera mínima de votos para acceder y encima las circunscripciones hacen que los ciento y algo mil votos se conviertan en mil aquí y 15000 allá.
Destaco el papel de Primavera Europea, que obtuvo un escaño. Coalición entre Compromís, Equo, Chunta Aragonesista, SIEX (Extremadura), PUM+J (Por un Mundo Más Justo, un habitual de los extraparlamentarios).
El esfuerzo ha sido máximo para conseguir un escaño: se unen partidos de izquierda nacionalista o regionalista (País Valencià, Extremadura, Aragón) con candidaturas ecologistas, y de cambio y justicia social, y vínculos a las ideas del 15M/Indignados/DemocraciaRealYA.
En su web aparece la iniciativa Democracia Participativa, que se trata de un grupo que se ha organizado básicamente por Internet (recuerda al Partido X en ese sentido, o al Partido Pirata). En su actuación, pidieron de manera abierta quién quería ser candidato para presentarse en elecciones primarias de aquellos partidos que las hicieran. Hicieron encuestas entre los interesados para saber qué forma de participació, de ideario, de programas, eran más aceptables. Y también presentaron a votación a los candidatos presentados.
Es un esfuerzo evidente que no he visto reflejado en medios de comunicación. No he visto que lo hayan destacado. Por supueston, en RNE, no. En Catalunya Ràdio, Mònica Terribas estaba muy ocupada con el SÍ-SÍ (y sólo se decía algo interesante cuando entrevistaban, por cuotas de partido, a David Fernández de la CUP). En el RAC, no. En la COPE o en Onda Cero, no son de los suyos, asi que ni agua. En Intereconomía agonizante o en la 13TV, en el TV3 avorrit-estel·lar,en los programitas que le han cedido a Vicent Sanchís en Canal Català luego ElPuntAvuiTV, o en el programa del cura (tan plural que dice que es), Democracia Participativa no aparece. Equo tampoco. Pero es que Izquierda Unida tampoco. La pluralidad tiene unos límites claros.
En la prensa escrita, apenas.
El acceso a los medios de comunicación es mucho más difícil para las opciones no vinculadas al poder, y para las autoorganizadas más o menos desde abajo, y para las vinculadas a modelos rompedores, sobretodo cuando son más bien de izquierdas que de derechas. PlataformaXCatalunya si que aparecía. Vidal-Quadras aparecía mucho mientras era del PP, y cuando montó a su derecha, VOX, dejó de hacerlo, en parte tal vez porque hablaba de dar voces y de abrir debates. VOX sería de los primeros partidos en votos que no accedieron al Parlamento Europeo.
En todos estos casos, incluido el PACMA, que crece y que puede aparecer en cualquier parlamento en un horizonte futuro desde el 2014 hacia el 2018, el ninguneo oficialista es la norma. Compárese con la gratificación mediática que obtuvieron UPD, Ciutadans o PXC, antes de obtener escaños o concejalías. Compárese con el arropamiento tertulianista que obtuvo Aznar, varios de cuyos ministros fueron tertulianos en la Cadena SER o en los programas de Jesús Hermida en Antena 3 en 1992-1996.
Los medios de comunicación ayudan a obtener publicidad. Ejercen un efecto escaparate de libros: si lo ocupas todo con el libro que la editorial quiera que sea un bestseller impides que se vendan otros libros, impides que se vean, se conozcan o se recuerden.
Y, de entre los medios de comunicación, la tele es el más relevante, en 1996 o en 2014. Es la gran sorpresa, pese a la presencia de Internet.
Ahora bien, todos y cada uno de los partidos pequeños que han obtenido escaños y los que no, han logrado números de votos mayores que en anteriores contiendas ellos o los partidos que estaban en su lugar
Ahora la campaña gubernamental y de los
partidos del sistema va encaminada a eliminar ese verdadero choque de
trenes. Van hacia condensar el voto. Se habla de coaliciones PP-PSOE (si
lo hacen, será una fusión por absorción del PSOE). En Catalunya, ERC
sigue al oráculo de Pasqual Maragall para convertirse en el eje del
Partido Demócrata estadounidense adaptado a Catalunya (osea, un partido
de derehcas que muy localmente puede hacer algo de centroizquierdas).
Para ello, ERC consigue coaligarse con Ernest Maragall y su Nova
Esquerra Catalana (NEC), una escisión del PSC, y ver qué más puede
atrapar. Ernest Maragall es de derechas sin paliativos y su proyecto de
ley educativa era igual de privatizadora que la de Wert. Que estuviera
escrito en catalán no significa más que son los mismos con distintos.
Entre sus ideas brillantes estaba la privatización y precarización de
subalternos y auxiliares administrativos y administrativos (los grupos
inferiores de la Administración) y su paso a esas empresas cutres de que
ofrecen servicios y que ya nos gustaría saber quién está tras ellas. El
Consejo Escolar se hacía consultivo en su proyecto (anda, como Rigau de
CiU y Wert del PP). Y se le oyó en cierto momento que eso de agrupar
escuelas para evitar ghettos de inmigrantes, nanay. Es lo que habían
hecho en Vic. Claro: haciendo eso, sus colegios públicos pero para según
quien, quedaban tocados y no podían ir de progres con mainadera y de no
juntarse con la chusma pringosa. De ser votados a ser tocados, hay un
trecho.
No sólo han caído los grandes partidos del turno, sino que, con igual abstención, el voto se ha dirigido hacia otras candidaturas. Aunque hubieran obtenido más votos los partidos grandes, en el sentido de que tal vez la abstención proceda de los votantes de esos partidos, hay más votantes que en otras Elecciones que han votado a cualquier otra candidatura, en un voto de protesta multifocal: votar otras cosas que no sean PP, PSOE o CiU.
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