Data Estel·lar manduquera Diumenge 20111211
Más o menos está claro cuando fue la primera aparición del personaje de Escobar conocido como Carpanta, de nombre Paco, según Protasio. Sería hacia 1946, en los números 3 (Tonimm) o 4 (Guiral) de la revista Pulgarcito.
En Tebeosfera dicen que fue el 19470127, el cual, según mis datos (muy parcialmente, aquí), sería por el Pulgarcito 845 de la numeración total que incluiría todas las etapas anteriores.
Sin embargo, no es tan fácil saber cuál pudo ser la aparición final de un personaje. Historietas de la serie Carpanta sabemos que las hubo durante los años 80, en la revista Super Carpanta, en la revista Bruguelandia [¡un blog sobre Bruguera y Bruguelandia! No lo conocía] o en la revista Mortadelo taplástico. El personaje entró en una nueva etapa. Protasio desaparecía, y se daba la entrada a la Tía Tula (de profesión, suegra feroz), en una nueva combinación de lo que era el UZ (Universo Zapatilla). Con ella llegaba su sobrina, Vale. El puente daba paso a las chabolas en un barrio entre de barracas y de urbanización residencial. Fue una etapa interesante que nos demuestra que Escobar siempre estaba despierto. Si lo ideó otro, que era abierto para adquirir esas ideas. Es una etapa fundamental pero olvidada: también en la España desarrollada y democrática había duros problemas sociales que no se resolvían.
En estas historietas vimos a Petra en la fue tal vez su última aparición pública.
Pero Carpanta aún siguió apareciendo cuando su serie ya no existía, aunque no tanto como Toby, convertido en el perro oficial de Zipi y Zape en varias historietas durante la etapa de Ediciones B.
Por pura casualidad, me encontré con una revista. Sé que no hay que despreciar estas revistas que un día te puedes comprar al final de hacerte un mercadillo de Sant Antoni, o que te topas cuando te quedan los dos últimos euros de un Saló del Comic... Se trata del Super ZipiZape, número 81, con un precio de 225 pesetas (1.35€, que a fecha del 2011 parece razonable pero que era muy caro para su época). La fecha es: 2/91, osea, febrero de 1991. En poco meses, para el verano de 1991 se acababan las revistas de esta etapa. Luego comenzarían, según parece -porque no lo tengo nada claro- la etapa final, con revistas denominadas Extra, y que llegarían a unos cincuenta números o poco más.
El caso es que esa publicación contiene un material atractivo: una reedición (vulgarmente, un refrito) de Mirlowe&Violeta, absolutamente extemporáneo en una revista de Zipi y Zape, un par de páginas de Vergara (personaje Benjamín.. con un estilo que me recuerda a una mezcla de La Jungla Loca (de Mic Delinx - Godard, que también aparece), de Jan con un poco de Jaume Rovira), e incluso el final de una historieta larga de Sofía (de Jidèhem), en lo que podría ser una historia primeriza (la niña parece más pequeña, aunque ya conduce coches, cómo no... si le ha enseñado Jidèhem).
Es la etapa en la que existen dos historietas de Zipi y Zape en la revista, de la cuales una, al menos, suele ser un refrito por lo que yo he podido comprobar. Sin embargo, y no pondré la mano en el fuego, en este caso es como si las dos historietas fueran nuevas... mira que me hubiera ido bien que hubieran puesto numeritos esta vez. Y las dos historietas tienen como invitado especial a Carpanta, que así es anunciado en la portada de la revista.
Pongo las imágenes de las historietas. Supongo que estarán por algún Olé, pero yo, desde 1991 y hasta el 2011 no me lo he encontrado: desde entonces los Olés y los superhumores han pasado por tamaños pequeños y grandes, y por reordenaciones de sus contenidos... pero nunca me he encontrado con estas historietas. A efectos prácticos, para mí que siempre me ido comprando cosas de estos personajes, no existían estas historietas hasta el 2011... y por Internet, ni mú, oigan, y eso "que todo está en la red", que dicen. Sadlymistaken me dice que fueron publicadas en el número 3 de "Olé mediano" (serie corta): se refiere a una serie de tapas brillantes, creo, entre la serie antigua que hoy conocemos como "colecciónole" u "olépequeño" y la actual (u Olé grande). De ser cierto, sólo se habría publicado en 1991.
De todos modos, de la primera historieta, titulada ¡Esas propinas!. sólo pongo las páginas 3 y 4, que es donde aparece Carpanta. Lo pensé así porque se supone que sería fácil de encontrar en algún Olé... aunque es de tontos pensarlo, como se desprende del párrafo anterior. Igual sí que tendré que poner las primeras dos páginas... hum...
La segunda historieta la pongo entera. Se titula ¡Otra vez Carpanta!
He marcado algunas viñetas en concreto. Pensé en poner sólo esas viñetas, pero es más trabajo y... bof...
Entre las características curiosas:
1.-Junto a las páginas de Roquita y Roco (la serie, ampliada, de Gosset, de la cual aún esperamos algún superhumor en condiciones antes de irnos al huerto los callaos, y un homenaje en condiciones a este genio del humor minimalista), la de Zipi y Zape debe de ser la única serie con tipografía mecánica estilo Bruguera. A mí me resulta mucho mejor, más legible, más clara, y encima en 1991 añadían los acentos, así que Miel sobre hojuelas.
2.-En ambas historietas aparece Carpanta.
3.-En ambas historietas aparece Escobar. Fijese cómo lo tratan los personajes: por un lado, es "papá", pero también un "hipócrita" que no lo hace aparecer en las historietas pero aún así se hace el sorprendido de no verlo a menudo. En la de ¡Esas propinas!, Carpanta persigue a Escobar. Véase cómo corre Escobar en esa última viñeta (p4v10) y compárese con cuando se dice que Tintín corre como si fuera de la edad de Hergé en Los Pícaros (1975).
4.-Zipi y Zape, por su lado, y Carpanta, por el otro, se reconocen pero no del todo: en p3 de la ¡Esas propinas! Zipi le pregunta a Zape si ese tipo es Carpanta.
5.- En ambos casos, los hermanos intentan hacer una buena acción que ayude a Carpanta.
6.-La mujer de la primera historieta le da un aire a Doña Tomasa, aquella que, siempre con fruición, va y alquila su mansión (otro personaje de Escobar).
7.-El estilo de dibujo es el habitual desde 1987: irregular. A veces por las dificultades de Escobar, no sé si físicas pero sí, al menos, de memoria, según cierta entrevista de un Dominical de El Periódico, la cual jamás he sido capaz de volver a encontrar. Pero supongo que buena parte de la responsabilidad debería atribuirse al editor y/o a los entintadores, porque no creo que Escobar lo hiciera todo. Igual los entintadores tenían órdenes de no alterar el dibujo, aunque fuera desproporcionado... o igual es que sí que lo alteraban, cosa que me temo, viendo cómo va el mundo, Facundo. Los fondos están muy simplificados. Los personajes son mucho más expresivos... más bien expresionistas... que en etapas anteriores. De una viñeta a otra pueden haber grandes cambios. Incluso el guión queda un poco perjudicado (Zipi y Zape, en p3, ya podrían haber puesto sobre aviso a Carpanta, en ¡Esas propinas!)
8.- En ¡Otra vez Carpanta!, el papel de Escobar es bastante más destacado en número de viñetas. Sospecho que nos encontramos también ante la última aparición de Papá Escobar 19081022 - 19940331).
9.- En esta ocasión, Escobar se intenta justificar ("son gajes del oficio"... la editorial no quiera a Carpanta y por eso no lo dibuja pero esa explicación no está bien vista y ocupa mucho espacio en una historietas de cuatro páginas).
10.- Por otro lado, se nos explica la dieta habitual de Carpanta (avellanas y aceitunas, cosa que sabemos desde principios de los años 70... porque tienen muchas proteinas y lípidos).
11.-Se nos destaca la dieta idónea para Carpanta: pollo asado y paella.
12.- Pero se añade algo nuevo -por lo menos yo lo desconocía- y es que frutas sí puede comer. Eso me recuerda historias de "los tiempos de las hambres". Por si alguien lo ha olvidado, en España, ha habido millones de españoles que han pasado hambre durante años; aunque los progres de salón lo circunscriben todo al "hambre de libertad", pero en realidad había otra que atacaba al estómago... hoy los nietos de aquellos hambrientos, y aquellos mismos hambrientos sufren por no comprarse la wii antes de que pase de moda o por si igual se les pasa el momento de ir a un balneario... y, eso sí, ahorrando mucho, porque compran las mandarinas más indigestas y el pan más gomoso en los pakis, que lo tienen muy barato. En aquellos tiempos, me cuentan a veces, que había hambre... pero, conforme se me cuenta la historia, lo que no había era carne en abundancia y trigo y derivados (harina, pan...). En cambio, sí que había frutas (en la versión que yo suelo escuchar)... pero no querían fruta, ni la usaban realmente para confituras o para conservas. En realidad, en esos tiempos también había una falta de conocimiento sobre cómo cocinar según qué alimentos. La pobreza y la miseria es mayor de lo que parece cuando te dicen: "y cuando llegamos a Cataluña nos enteramos de cómo hacer que las habas o las judías -u otra legumbre- estuvieran blandas para no rompernos los dientes". Exageración, pero poco, lo cierto es que la formación es necesaria incluso para comer y cocinar. Y el hecho de que Carpanta coma fruta pero no la ansíe me hace recordar esa historia.
13.-La Teoría del sino: buenas acciones que se estropean y maleficios que impiden a Carpanta poder comer, pese a la buena voluntad de la gente del restaurante. Y ambos acaban en el cuarto de los ratones.
14.-¿El dueño del restaurante podría ser Protasio o un familiar suyo? No se dice pero...
15- Como no debía de faltar, nos aparece uno de esos trabajadores que hay por la calle -alguien lo comentó bien comentado, pero no localizo el enlace-, en p4 de ¡Otra vez Carpanta!
16.-Atentos a la espiral de correr del personaje que trabaja en la calle.
17.- Don Pantuflo, una factura, un señor que va por la calle, un pollo asado, paella, buenas acciones, el sino, el cuarto de los ratones... la acumulación de elementos del Universo Zapatilla no puede ser mayor en estas cuatro páginas, de una historieta bastante potable (en el buen sentido).
17.-La verdad es que el final no puede ser más triste... ¿acaso el lector no puede ni ver comer a Carpanta ni a Zipi y Zape llevar a cabo una buena obra? ¿Tiene que ser el mundo tan injusto? ¿Ni en su última aparición Carpanta pudo comer?
18.-Los numeritos son del tipo de los usados a partir de 1987. Son figuritas divertidas, ocasionalmente con ojitos. Con frecuencia están clavados a la páginas (para los torpones de los monos: un clavito, alcayata, chincheta o similar, está dibujado hace como si el número estuviera clavado a la página)
1 comentari:
Interesante entrada, me alegra que dediques tu tiempo a hablar de personajes menos comentados y estudiados.
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