Chistes de la parte inferior de una página de la parte derecha del Super DDT 127 de diciembre 1983 |
Si nos planteamos estos chistes como publicados casi por última vez, por la renovación de las revistas Bruguera en enero de 1984 y por su desaparición posterior, tienen un valor histórico.
Si nos lo planteamos como que se publicaron por poner algo, hay que hacer un análisis sociológico.
Para empezar, hay tres chistes de Conti: el segundo de arriba, y el primero y tercero de abajo.
El primero de abajo es el más antiguo, ¿no? Me resulta a veces difícil distinguir ese tipo de dibujo de Conti del de Vázquez de los años 1950.-1960 o incluso del Ibáñez que se parecía a aquel Vázquez.
Por tanto, a nadie le extrañe si he acabado asignando a Conti algún chiste sin firma que alguien sepa que era de Vázquez, o viceversa.
El de Joso del marinero, bueno, es que estaba ahí, y sabrán ustedes que Joso hacía chistes antes de poner una academia de dibujo.
El primero de arriba también es de Joso, y siempre me llaman la atención ese tipo de chistes de ir a ver a los presos. Si lo miramos bien, ya es triste ese subgénero, pero es mejor no mirarlo bien y no pensarlo.
El chiste de los cazadores, de Torá, al final esas cosas se convierten en realidad. Cazadores, como hemos visto, para los que la caza es otra forma de seguir ganando y van a cazar elefantes con obuses o lo que sea con un montón de perros y ojeadores, que así caza cualquiera, claro. Si ya es dudoso que sea deporte eso de matar por placer entre gente que tienen más comida que años por vivir, está claro que no es nada deportivo matar bichos y menos con armamento de una guerra mundial. Pêrfecto que Torá señale ese punto.
Los otros dos chistes que faltan son de Conti y conviene explicar algo: no me gustan. En el siguiente sentido: el de los pantalones de mujer es ridículo de origen. Esa separación extrema entre ropa de hombre y mujer. Encima ese chiste procede de la "moda" luego convertida en algo habitual de que las mujeres llevaran pantalones a partir de los años 1960-1970 en vez de falda o vestido, o añadido a ello.
Resulta que históricamente quien llevaba faldones era más bien el hombre. De otras culturas no europeas sale lo de los pantalones. Así que no es quefuera algo imbuido por una ley divina: "y los hombres irán así y las mujeres asao". Que lo hiciera Conti, de otro siglo, de otras épocas, puede tener un pase, aunque no cuadra con su afán "moderno" por la astronomía y los cohetes. O igual sí, porque no es incompatible ser avanzado en una cosa y atrasado en otra. El problema es que eso se repite en 1983 y no en 1970, y que 2017 aún la tontuna sigue. Rosa para mujeres... o para gays... etc, etc, etc.
Y el otro chiste, pues tiene su gracia de aquella manera: porque es una domadora que se asusta de un ratón. Pero podría ser un domador... pero no, es una mujer domadora y, según el tópico de que las mujeres y los elefantes se asustan de los ratoncitos. Al menos, lo primero es mentira: se asustan de las arañas y de las pobres abejas y las matan. Eso lo hemos visto. El caso es que focaliza el chiste en una mujer que se asusta de un ratón y que resulta que es domadora... pero lo mismo podría ser para el domador o para el león.
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