Data Estel·lar buf y re-buf Dimarts 20250527
Por fin me he leído los dos tomos amarillos del 2018 o 2019, justo prepandémicos, de Daniel Ortega, no... se de Ortega y Daniel... "La Historia no es tal como no la contaron". Dos tomos que tal vez tiene demasiada separación temporal pero hipnoticos igualmente, 1899, 1955... no sé si hay más. Planeta Chile, pero vendidos en PlanetaComics en España. Los compré de casualidad en el Saló del Comic de hace años por eso de "darle la oportunidad algo raro": acerté, pese a la crítica que voy a hacer. De hecho, llevo días pensando si sería posible ponerse en contacto con esos autores... igual tienen 10 tomos más y mis ideas estás trasnochadas.
Hay mucho que decir pero me temo que esto es otra de esas cosas que solamente he leído yo o que quien lo haya leído es de otro rollo.
La metahulla (más que hulla, más que carbón) es un material explosivo que genera una impnente revolución industrial chilena, una especie de carbón radioactivo magmático(así lo veo yo, no es que lo cuenten) que se puede solidificar o gasificar. Me dejo algo que sí se cuenta en el libro sobre sus yacimientos, si se agotan, si fluyen, si se contraen o si se expanden. Suena raro pero el petróleo o el gas natural es lo mismo; innumerables tipos de plásticos salen del petróleo. Sus aplicaciones son infinitas, comenzando por la original de hacer volar barcos hasta implantes biológicos. Los peligros van a la par.
No puedo afimar que sea un Eternauta del siglo XXI porque no he podido leer aún nunca esa famosa historieta. Y no me vale con una serie de la tele.
Rápidamente con intención de regresar otro día a contar más cosas sobre estos tebeos:
1.-Dibujo del segundo tomo mejor. Con un Che Guevara con expresiones y facciones mangas muy bien traídas. El dibujo del primer tomo tiene graves problemas: demasiados bustos parlantes en una historia que merece paisajes urbanos que nos enseñen el mundo metahullano.
2.-Mejor el texto escrito del cuento largo-novela corta.
3.-Mal: solamente hay referencias al Victorianismo: novelas y demás brtiánicas y francesa del siglo XIX, algo de USA, a pelis... hum... no existe nada ni nadie de la India, China Japón ni África, y la dinastia Greystoke no cuenta, ni Ayesha porque sus creadores son del Nortes.
4.-Es otra historia burguesa de las élites. No hay obreros; no hay mineros metahulleros.
5.- Lo mejor es la ambientación en Chile como un espacio que por fin cobra una existencia en el mundo: pasa a ser la primera potencia mundial como Andinia.
Estamos ante una avasalladora novela gráfica repleta de recuerdos, flashbacks, presentes y futuros y futuribles, con mentiras sobre el pasado e invenciones como la Ciencia Ficción en parte de uno de los protagonistas más interesantes en el primer tomo pero olvidado en el segundo.
El mundo de la Edad de la Metahulla tiene mucho por desvelar pero no sé si a mí me lo contarán alguna vez.
Occidente: Chile se encuentra en Occidente. Todo se encuentra en Occidente, al Oeste del Tratado de Tordesillas, al Oeste del Meridiano Cero o de Greenwich, en el Hemisferio Occidental pensado por los Estados Unidos de América durante el siglo XX.
El libro de Occidente por Alessandro Vanoli... comienza a estar presenta allá donde miro.
En la carrera, de manera torpe, me intentaron contar conceptos como Norte-Sur o Centro-Periferia, así como un sistema como de pulpo.
Para simplificar, existen unos países del Norte que esquilman recursos al Sur, que es un pozo de materias primas necesarias para la industria del Norte. Eduardo Galeano documenta que los Estados Unidos de América habían llegado a legislar, mediante sus peleles en forma de gobiernos títeres, para que las exportaciones industriales quedaran gravadas (fueran más caras) que las importaciones desde los USA, manteniendo a esos países en una situación de debilidad porque el precio de la materia elaborada aumenta con el tiempo (más tecnología, productividad aumentada basada en esa tecnología) pero el de las materias primas disminuye (mano de obra barata, poca productividad, poca tecnología propia) y además resulta que la materia prima iba a ser sustituida por materia prima industrial elaborada en el Norte industrial, es decir fibras sintéticas de petróleo frente a algodón o lino... decir y contar eso es algo que enerva y pone en guardia durante décadas a Mario Vargas Llosa (alguien a quien le gustaba la Barcelona oprimida por el Franquismo porque allí encontraba libertad pero odiaba la Barcelona libre en la que el idioma catalán tenía presencia pública).
Pero la visión de los comics de la Metahulla no es Norte-Sur.. sino Occidentte, en todo... tanto es así que absolutamente todas las referencias son occidentales en el sentido de USA, Gran Bretaña o, a lo sumo, Francia... e incluso el nuevo polo de atracción en el siglo XX metahullano para los chilenos es Empire City (ex-New York). Desde Moby Dick hasta Tarzán todo son referencias de ese origen geográfico-literario, aunque descubiertas o mediatizadas por los chilenos dueños de la metahulla.
Tanto es asi que se habla de momias "egipcias", que es como decir "las momias inglesas de Carter" en vez de hacer referencias a momias precolombinas andinas, incas, o tal vez mayas o aztecas y otras. Ahí me quedé muy parado.
Entiendo que no hay novelas de Ciencia Ficción o aventuras mexicanaas, argentinas o venezolanas o brasileñas... de las que echar mano... pero tampoco de Karel Kapec y su Guerra de las Salamandras o de, tengo que ponerlo, Jesús de Aragón, el "Julio Verne español de los años 1920" con alguna novela en la que hace transitar a sus personajes por las cavidades de los polos norte y sur, un tema que aparece en estos tebeos de la Metahulla. Ya no digo nada de Osamu Tezuka, si hablamos de androides con Tetsuwan Atom =Astroboy. Hey, sí que sale un doctor Henry Frankenstein, osea, de nuevo una referencia británica (novela) y estadounidense (película, con Henry, en vez de Víctor) aunque el personaje sea de origen germánico o similar.
Pero todo esto es lo que yo pienso en un mundo del siglo XXI que debería ser cultural o literariamente amplio y cosmopolita... pero lo que sucede, lo que sucede en el tebeo se tiene que leer...
Sí.. Lo demás que sucede es ... sorprendente.. si comenzamos por el enfrentamiento entre dos catalanes, Grau y Prat... ¡que son dos apellidos catalanes sin más discusión! Uno es peruano, el otro es chilenos. Grado y Prado. Si luego vamos a los ataques, a lo que es o puede ser la metahulla, a todo lo que acontece, a extraños compañeros de viaje... a una novela corta-cuento largo final que no es exactamente igual a la novela gráfica pero sí más claro y más nítido y precisando mejor tanto lo que sucede como los lugares... que luego va seguido de un portentoso diccionario analítico-orgánico como dice mi enciclopedia Durvan, con datos que nos sitúan aún más en lo leído, y que se amplía en el segundo tomo, a veces con las mismas entradas un poco cambiadas para adaptarse a la época que toca (1899, 1955).
PERO LO QUE MÁS IMPRESIONA ES LA SENSACIÓN DE TENSIÓN DE TODO EL PRIMER TOMO. Pocas veces, casi nunca, he leído algo que me generase tanta tensión, tant sensación nerviosa en las muñecas y en los antebrazos de que algo malo iba a suceder en cualquier momento... de que, si el pasado no era como nos lo habían contando, había mucho de ese presente que tampoco era como nos decían las viñetas... y incluso puedo decir que los falsos finales me calmaron porque había cosas que no sucedieron o que no estaba claro que hubieran sucedido.
Es raro... pero la culpa es tuya por no haberlo leído.
Ellos hablan de 1899 pero yo pienso en 1898 y no entiendo el papel de España en la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas... es un imperio que desaparece pero que, desde mi punto de vista, debería haber sido conquistado por Andina y su poder militar metahullano, pero se tiende, otra vez a darle papel de los Estados Unidos.
El resto del mundo: Bolívar, Niponia, Unión Africana, Iberia, son citados sin más información con un desinterés total por lo que sucede en el resto del mundo... No hay árabes ni hay islamismo politico, por ejemplo. Se cuenta la ausencia del comunismo o del socialismo de manera plausible, eso sí, pero hay que tener la paciencia de leer los dos tomos o de ser perspicaz (yo no lo fui, la verdad) y acertar con la solución o parte de ella.
Los persanajes se mueven según los hilos del guionista y autor de la novela corta, Francisco Ortega, como he contado hace poco que hace Peter David. Bien es cierto que, como lector, yo hubiera preferido a ratos que hubiera movido otros hilos en según qué momentos.
Quiero saber más sobre la metahulla, sobre sus usos, sobre los habitantes de Andinia, sobre qué pasa en esos sitios, qué piensan las gentes, qué sucede en la India, en China, en Madagascar, en el Congo, y en Iberia...
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