Data Estel·lar núvols i grisos Diumenge 20190609
A la vez: leer y releer Es lo que tiene ir haciendo compras a lo largo de los años para completar colecciones de revistas.
Revistas leídas varias veces con varias adquiridas por primera vez.
Anotadas las fechas de compra, es curioso comprobar que números posteriores los encontré y leí medio año o un par de años antes que los anteriores. La distribución birriosa de los tebeos, por más que digan, es la gran rémora y siempre lo ha sido. ¿Cuántos lectores se habrán perdido por eso?
El otro día regresé al Cortinglés de SBD... parecía que había muchos pero eran como restos, varios en no buen estado. Días después volví a investigar el apartado de librería del Carroful del Baricentro de BdV, una penosa birria.
La llegada de Penguin Random House no ha servido de nada. Los tebeos de Ediciones B/Bruguera han desaparacido por completo salvo un par de Magos del Humor o un TopComics repetido ¡del año 2011! En paralelo a las listas de espera de la mal llamada Sanidad mal llamada Pública en Catalunya. Y no hablo por hablar, oigan.
En cuanto a los superhéroes de Panini Marvel, nada. Lo que hay son libros, cuentos ilustrados y poco más en el Carroful... o en el CapraboEroskizado. Nada. Si el objetivo es que nadie lean tebeos, ni los niños, pues las dos grandes empresas generalistas, Panini y Penguin han dado en el clavo.
Entré en el Abacus. El Abacus del Baricentro es de lo más triste que te puedas encontrar. Sustituye a la antigua librería La Llar del Llibre, la única un poco simpática de la cadena sabadellense. No me voy a callar ahora, que han tenido 40 o 50 años para mejorar. Que sean un monopolio no quita para que no veamos la verdad. Si quieres no encontrar un libro, lo mejor era ir a esa librería. Hace años que tienen una especie de gran establecimiento con dos puertas por dos calles. No es que haya mucho más pero al menos te puedes zafar de los vendedores que tampoco te van a encontrar el material. Otra vez: con conocimiento de causa y con su internet y base de datos telemática en el año 2002, y antes sin ordenador y luego ya sin cliente porque tengo alternativas. El caso es que la pequeña librería del Baricentro sí tenía su gracia. Desapareció para ser, sea por contratos o ser por los hechos, por Abacus. Nada que ver con otras Abacus, como la del centro de SBD, como la de la UAB o como la que considero la central, la de Ausiàs March en BCN. Menos libros, menos variedad de productos de papelería... y, si llevan 2 o 3 años, ya han tenido que cambiar el sistema de entrada por uno más adecuado de arco magnético para evitar robos.
Vamos a los tebeos: poquísimos... Abacus ha sido tradicionalmente reacia a los tebeos, salvo Astérix, Tintín, Mafalda en los años 1990-2000. Para el año 2000, como supongo que los trabajadores tenían hijos adolescentes metieron algunos mangas. Nada. Luego ya se abrieron hacia el 2005-2010, con aquel auge de la novela gráfica que arrastra a todo tipo de tebeos. La era de Glénat con su Esther y sus mangas. Insólitamente Abacus permite la entrada de tebeos de Mortadelo y Filemón. En fin, que parecía que se habían civilizado. Ignoro cómo seguirá por otros lados pero es muy pobre en el Abacus de Baricentro, centro comercial que deben de pasar unos 10000 clientes diarios que abarcarían a 3 comarcas, y unas 15 localidades próximas de alta densidad de población... Que la gente no lee: tampoco se ofrece una gran selección de lecturas, eso ya os lo digo.
Las librerías han caído en las garras de los bestsellers para adultos o para niños.
En el caso de los tebeos, aún peor: han caído en una especie de cutre pedagogismo. Vi un tebeo de Humboldt, científico alemán del que nadie sabía nada pero que se ve que está como de moda: 250 aniversario. Su hermano crea la universidad en Berlín... esto lo sé porque me lo ha contado alguien cercano que lo sabe por sí misma, no por las modas establecidas. Pues es una cosa fea y cutre: no hay paisajes para un tío que se pasó el tiempo haciendo de explorador en zonas de la América tropical, de Venezuela... lamentable. Opinión mía: pero que no lo voy a comprar, claro. Pues eso sí está destacado.
Si nos vamos a productos "mainstream". Superhéroes, poco, poco. Y además, que es un lío porque ¿qué hace un lector cualquier? ¿Se compra un tebeo cualquiera? ¿Y va antes o después de otra saga? ¿Y qué referencias tiene? Mal.
Eso es por lo que existe porque luego está todo lo que no existe. Pensaba en Lucky Luke. No existe. Que lo llamen como quieran: no está en una tienda grande, por lo tanto, no existe. Y lo de Dolmen... nada. Solamente existe en los salones del comic.
"Vete a una librería especializada" sería una respuesta insolente. No la acepto porque no estamos buscando productos muy especializados. "Antología de los pioneros del comic en Hungría". Estamos buscando cosas que fueron encontrables, aunque no voy a decir "populares": Spirou y todo eso.
Ya no hablo de otras editoriales.
Pero, vale, si nos vamos a las librerías especializadas... les damos una oportunidad. Nos hacemos un camino de 40 minutos o más en transporte multimodal y, salvo las grandes librerías barcelonesas, nos encontramos con un panorama "sencillo", para no ser insultante. Lo que toca ese mes o esos dos meses de DC o puede que de Marvel. Luego los muñecos cabezudos, que sí se pueden encontrar en otras tiendas, así que no vas a esa tienda para eso. Poco más. Casi nada más.
Falla mucho.
Sé que a nadie le importa. Sé que está todo el mundo de los que mandan pensando: a ver si las tiendas colapsan y todo el mundo compra por internet, y el oligopolio internáutico está pensado que, en cuanto suceda, subirán los precios al máximo y presionarán a los legisladores para impedir nuevos competidores.
O que sea en pantallas. Pues vale. Pero todo eso son rendiciones: se ha perdido la guerra de la distribución. Se perdió en kioskos, en librerías pequeñas de barrio, en cadenas, en hipermercados...
Vamos a lo siguiente. Es que de libros de los de "solamente letras", el panorama en un centro comercial tan inmenso, es minúsculo. Los libros de los cuatro fachas elitistas que toca: una época fueron los inetereconomistas, luego son los del lazo amarillo. Los autores de bestsellers... y poca cosa más. Menos mal que la editorial Susaeta aguanta en algunos lugares con libros curiosos... y, menos mal que ya tenemos la Ilíada y sus primas porque, cosas así, de literatura clásica que no salga en el temario ¡puaj! obligatorio ¡a lavarse la boca con lejia! de la ESO o del Bachillerato, no vas a encontrar apenas nada. Vamos, que el sector de libro o de la cultura es pseudocultural: un rebaño al que obligan a transitar por los pastos yermos y secos que a los pastores les interesan, y encima, contentos, porque se piensan que adquieren cultura, porque "mira lo malos que son los curas según el Código Da Vinci" o lo último que sacan.
¿Tienen las editoriales y grupos multimedia propietarios de editorial un interés específicio por la destrucción del panorama cultural amplio, variado, extenso y cultural?
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