20100617

Algo que no tiene por qué gustar

Data Estel·lar cautiva y desarmada Dijous 20100617

A continuación, algo que no os tiene por qué gustar.


A mí no me ha gustado nada el golpe de Estado a cámara lenta que venimos sufriendo desde diciembre y aquí sigo.

Dedicado a todos aquellos. 

Incluido a los que esperan a hacer una huelga para cuando ya no haya trabajadores.

Y a los que han optado por comprobar si son capaces de cargarse el Sector Turístico a base de despedir entre junio y julio a los trabajadores que lleven más de un año en cualquier empresa. Se supone que la inseguridad ante el futuro próximo, el paro repentino, y la inexistencia de ingresos presentes pondrían en funcionamiento algún mecanismo racional para retraer el consumo innecesario, que suele ser tradicionalmente el ludico. Así que, igual esta gente taaaaaaan lista que gobierna en Europa y en España igual han decidido que el Sector Turístico también se puede ir a hacer gárgaras. Porque está claro que las empresas van a comenzar a despedir gente desde que el Decreto ese tan necesario sobre una reforma laboral que tooooodo el mundo pedía (menos yo, y nadie de mi entorno, que somos raros). Con lo dificilillo o directamente imposible que ha sido meter en vereda a todos los ladrones de guante blanco y lo fácil que ha sido enjaular otra vez a todos los asalariados. Felipe González nos amargó la adolescencia; Aznar, la juventud; y ZP está consiguiendo envenenarnos el resto de la vida laboral. Gracias por nada a los tres. Y ya les podéis decir a esos ministros de Economía que sólo gastar en los caprichos de los ricos y no invertir en las necesidades de los pobres es fácil de hacer. No se necesitan licenciaturas, ni masters, ni doctorados, ni Oxbridges, ni Stanfords, ni Chicagos, que eso ya lo sabía hacer Luis XV. Y Fernando VII. Y otros dictadores.

Y ya hemos visto los límites de la democracia. Sólo se permitirá la participación de los ciudadanos sobre absolutamente nada y sobre un poster de un candidato. Como en la añorada América Latina de antes de los Hugos Chávez y de los Evos Morales.

Y, ya sabemos que los que no han conseguido ser emperadores del planeta piden más armas y más soldados, es decir, más dinero malgastado, para Afganistán... Y eso no se recorta, que hay puede ser que haya más dinero opaco que en una urbanización de Salou o de Marbella,  o que en una localidad de esas cuya propiedad es de Millet.

Si alguien recuerda a Aznar, el tipo aquel del bigote como Rompetechos que pasaba por querer ser un líder mundial. En cuanto comenzó su guerra particular (se podría hacer un tratado de psicología sobre sus decisiones), y murieron los que murieron, en la localidad de Badia del Vallès, a la velocidad del rayo, de un día para otro, alguien escribió: "Vuestra guerra, nuestros muertos".


Ahora, ZP, emulando a su digno antecesor en el cargo, de cuya caspa no se pudo jamás desprender. O no quiso. Tras varios años de miedo y pavor ante cualquier decisión positiva, que cumpliera con su programa, con sus electores de centro-izquierda e izquierda, con los partidos políticos que eran sus aliados, con los menesterosos... después de marear la perdiz para nada... decidió que ya estaba bien de tonterías, que las cosas tenían que ser para los que van de montería y no para los que buscan las perdices (sacado de Don Erre que Erre, claro).

Y, dado que lo ha emulado de tal manera, justo es que disponga de la misma respuesta:


A lo que vamos.

 Vuestras guerras...


... nuestros muertos: