Los trenes en junio del 2008

Data Estel·lar chukuchú catapum Dissabte 20080607

No me queda más remedio que volver a decir que los trenes de Cercanías de Barcelona de la Renfe no han funcionado bien -otra vez- durante la última semana.

Un día anunciaron que pasarían al horario de verano. Tal vez sea por eso por lo que uno de los trenes de la hora punta de la mañana hacia las ocho, directamente no pasa, y se hace una media entre ese tren y el siguiente y pasa uno entre los dos. Olé. Tampoco es que sea nada nuevo.

Un día, creo que fue el martes, no hubiera podido coger el tren que estaba en la estación... precisamente por eso, porque estaba en la estación, pero yo aún no había accedido al interior. El tren se espero demasiado rato... y lo conseguí... Ya intuí que algo iba mal pero, al menos, me senté. En Montcada-Bifurcació el tren se paró un tiempo indeterminado, tal vez 6 o 7 minutos... menos que el tiempo establecido para las quejas y devoluciones de importes por retraso.
Al menos, no pararon las luces ni el aire acondicionado. Por supuesto el miserable del conductor ni siquiera se dignó a comunicar que el tren estaba parado, ni a abrir las puertas.

Es uno de esos ejemplos que son tan habituales.

Otro día anunciaban que, en plena época de exámenes -y yo paso de creer en casualidades- la línea C7, la de la Uni, quedaba bloqueada por una avería de cualquier cosa en Castellbisbal (estación de esa línea).

Pasan hacia las tres clavadas aquellos trenes de la C2 que tendrían que pasar hacia las tres menos cuartos, así vagamente, porque es habitual que un tren llegue con margen (-3, +5) minutos para ser considerado un tren que va a la hora. Eso sería el viernes.

Creo que fue el jueves cuando las puertas de un vagón no se abrían; simplemente, el conductor se olvidó de desbloquearlas.

Entretanto, en Barcelona-Sants estaban los trabajadores de Grandes Líneas, AVEs y demás manifestándose por la precariedad. Resulta, entre otras cosas, que cobran por horas... pero los trenes de esas líneas se supone que hacen trayectos de 6 horas en 2 horas... Tal vez los de Cercanías también cobren por horas. Eso explicaría el comportamiento de los trenes.

Dado que estuve rato por Barcelona-Sants, tendré que comentar algo sobre ese desastre llamado Estación de la Renfe: es una estación hecha deprisa y corriendo a mayor gloria del AVE, que es donde viajaran los pringaos pero, claro, también las élites, las que no saben que los trenes ya no van a vapor porque no los han cogido jamás. Y eso explica la dejadez de la Renfe... por ejemplo, en relación con la menor dejadez de los FGC (que pasan por los barrios burgueses de Barcelona y por Sant Cugat del Vallès, oh, nuestro gran Sant Cugat).

Las líneas de Cercanías están apiñadas en un rincón, el más lejano posible de las entradas al metro. En la disposición anterior, al menos alguna línea (¿la C4, la C1?) estaban cercanas al metro. Se supone que los trayectos de Cercanías no dejan de ser un metro interurbano. Que cuando alguien llega a Barcelona ha de hacer transbordo en otro medio de transporte, posiblemente el metro. Pero a los grandes dioses que quieren controlar nuestra existencia no se les ocurrió otra cosa más que alejar las líneas de Cercanías del Metro. Otra vez: olé.

He dicho que las líneas de Cercanías están apiñadas... Y lo están. Las líneas C1, C4, C7 u C3 pasan por el mismo andén (el 7-8). Alguno de esos trenes puede pasar por el andén 6, por un poner... pero casi todas las líneas pasan por el mismo andén. Ahora calculemos que en cada tren bajen -Sants es una estación de bajarse, de vaciar los trenes, al llegar a Barcelona desde el Sur, lo cual es muy agradable para ir hacia el Norte- unas 200 personas. Y que, en cada viaje, de cada línea se suban unas 80 personas. 80 personas por 4 líneas por 2 sentidos (vía 7 y 8 comparten la misma acera o andén) me salen... estooo... 640 personas + 200 que bajan de un tren y 200 de otro =1040 personas allí agolpadas en unos andenes que, en la zona de acceso a los vagones tienen una anchura de un metro y medio. Porque resulta que a los grandes ingenieros de este país no se les ocurrió nada mejor que colocar las escaleras como si no fuera necesario caminar por los andenes: o bien subir y bajar... o bien estar en los andenes... No podían hacerse ambas cosas. Me pregunto que habrían pensado los mayas de las pirámides ante esa disyuntiva.

En resumen: no hay sitio para estar en esos andenes. No hay manera de saber si el tren que llega es el tuyo. Es incómodo caminar por unos andenes estrechos. En el sitio donde el andén es ancho, muchos trenes no paran, sino que paran en el sitio donde el andén es estrecho. Esta última frase puede parecer tonta y mal escrita pero recomiendo que se piense sobre ella. Y otra cosa: sobre el tío al que pagamos, yo y otros que tributamos a Hacienda, esas losetas por entre cuyos dibujos más de uno se va a dejar los empeines o los dedos. Espero que todo ese dinero se lo gaste en podólogos.

Y, por favor, que alguien le tape la boca a la ministra de la voz de cazalla. Al menos que se calle, ya que no piensa hacer nada por los usuarios del tren, al menos que le pongan en los labios cinta aislante o silicona blanca o espuma de poliuretano (a menos de 3€ en el Akí y en el Leroy desde el verano del 2007). Que no moleste, que no grazne.

Mis soluciones: un andén para cada línea de Cercanías. Como mucho, admitiría que fuera compartido por la C4 y la C7, líneas cuyo recorrido es el mismo hasta Cerdanyola del Vallès.

No es una cuestión de dinero. Es una cuestión de capacidad, de sentido de la eficacia y de la eficiencia. Pero Sants tiene un par de andenes para Cercanías y como 10 para los AVEs y esas cosas. Se trata de unos trenes que básicamente suelen estar parados: las vías de Cercanías estarán más desgastadas a día de hoy que todas las otras en diez años.

Y esos andenes serían fijos. Siempre vendría por el andén 7-8, por ejemplo, el tren de la línea C2. Y se acabaron los líos y los problemas de gente que no sabe en qué tren se monta. Y que van preguntándonos a los que sí lo sabemos: ¿Calella? No, Calella, el de Maçanet, el siguiente, creo. Porque, claro, jamás hay nadie para preguntarle.

¿En dónde era? Ah, era en Barcelona-Arc de Triomf, la primera semana de junio, una señora tenía una duda, así que apretó el botón de ayuda. Es una tontería. Siempre he sabido que ese interfono era otra estafa más de la Renfe. Ese día lo comprobé ¡porque lo oí!: "señora, ke yo no lo sé (con voz de "¿para qué molesta?")... (tono más conciliador) Ej ke yo soy el guahdia de seguridá
... y sé de qué va esto". La cosa era simple: el tren -"cap a Sabadell, per on passa?"- no llegaba porque tenía que haber llegado, según aquella persona que no solía coger la Renfe, según confesaba y que se pensaba que los ferrocatas van mejor (unos días después, uno descarriló), porque siempre se lo piensan (van mejor si tenemos en cuenta que son más nuevos, y que sólo son dos líneas, así que las incidencias se notan menos).

La lección que aquella señora jamás podría haber aprendido ni en mil años: "un tren de Cercanías ni ha llegado ni se le espera"... hasta que no está en el andén.

Así está pasando el mes ferroviario de junio.