20080125

Las series gafapas según un documental

Data Estel·lar paper a paper divendres 20070125

Dieron un curioso documental por el Canal 33 hace un mes, el 20071222. Por la pinta, podría haber pasado como uno de esos documentales exagerados de La Sexta, que recogen lo que han sido los documentales de L2 (TVE-2) desde 1994, donde el impactoTV era más importante que o, directamente, suplía al contenido.

Título: Hollywood. El Regnat de les sèries.
Era de Arte.
Canal 33. 20071222

Con esa insana costumbre de ver la tele con lápiz y papel (gracias al que me regaló el taco), colocaré algunas frases que me interesaron. Por supuesto, las comentaré.

Como parte previa, sólo diré que, para el documental es como si jamás hubieran habido series de televisión antes de las series gafapas. Ni Star Trek, ni Viaje al Fondo del Mar, ni El Equipo A... ni mucho menos, series de comedia ni infantiles ni de otros países (algún día habrá que hablar de Ravioli).

És fantàstic tenir una història amb 10 anys.
Els guionistes y l'audiència comparteixen una història
Es un torpedo contra la política de las grandes editoriales de superhéroes (hablo de tebeos). Así de directo. En los tebeos se lleva, desde que comenzaron las series de ese tipo (se refería a "Urgencias"), en los años 90 del pasado milenio, a decir que la culpa de no conseguir nuevo lectores son historias que comenzaron hace cuarenta años. Entonces se sacaron los Marvelution, los Heroes Reburn, los números uno otra vez (Heroes Return) y los Marvel Knight y los Ultimates. Y destruyeron el Universo Marvel al segmentarlo en trozos indepedientes e inconsecuentes con ellos mismos. Hasta llegar a lo de Mefisto, eso de "que si te hago olvidar todo lo que ha pasado como si no hubiera pasado" ... De ahí el refrán "Si mefisto, no me acuerdo".

El programa tenia memoria, continuïtat.

Más de lo mismo. La continuidad es el ogro, con perdón, a destruir, en los tebeos. O la invención de nuevas continuidades o de incoherencias, exigiendo desmemoria al lector.

Cal tenir coneixements dels 99 episodis anteriors. Es crea un món com els de Dickens.

La referencia al gran autor del manga Historia de dos ciudades es necesaria porque representa al escritor anglófono que describe hechos sociales de su época, el siglo XIX. Se supone que estas series de tonillo gafapa están relacionadas con la realidad... más aún, con una realidad que le teme y le rehúye.

De nuevo, recordemos como los tebeos actuales odian todo ese vínculo con el pasado. De hecho, no es raro oír que un autor, ahora pienso en Oriol Garcia i Quera (autor de Serrallonga) diga que él prefiere álbumes sueltos, con historias que no continúen o con personajes nuevos. En realidad, es lo que llevamos leyendo continuamente: un temor a crear un mundo. El propio Cels Piñol que comenzó diez mil veces su Fanhunter rehúye ese referente del mundo que parodia, rehúye la continuidad, y vuelve al inicio una y otra vez. Bueno, cuando hacía tebeos, porque hubo una época que el tío hasta hacía tebeos.

La televisió és el mitjà dels guionistes.

Entonces, ¿tan malos son los guionistas que todos repiten los mismos clichés, las mismas palabras, los mismos diálogo y las mismas escenas? Si la tele es el medio de los guionistas, ¿por qué J.M.Stracynski, se pasó a Spiderman hacia el año 2001? ¿Ha continuado Babylon5? ¿Ha hecho nuevas series?

De esa frase, y de la de Dickens, es donde se le ve el llautó a los guionistas y productores del documental: dar un toque de prestigio. No son los actores, son los guionistas, y los directores cambian. No es la productora ni la cadena que lo emita. Es un clásico movimiento gafapa que intenta evitar el vacío. Se supone que el guión existe en cualquier tipo de narración. Por supuesto, obvian -por propio interés- la longevidad de series como Eastenders (Gent del Barri) y sus homólogas holandesas, danesas, catalanas... así como la longevidad de géneros como los culebrones sudamericanos. En ambos casos, los actores pueden ir cambiando, por lo que serían los guiones lo relevante. En algunos casos, como el ya comentado (esto de "antiguos post" creo que no sale, ¿verdad? No sé ponerlo) caso de "Destilando amor" tiene unos toques de guión muy trabajados. Así pues, ¿qué diferencia hay entre esas series en las que la importancia del guión y los guionistas es capital? ¿Y de Jim West (Wild Wild West), es que acaso no tenía guión durante decenas y decenas de episodios?

La respuesta es el público objetivo: un público que exige ser tratado como distinto y distinguido ("apreciado positivamente" y "seleccionado") que esa purria que ve culebrones y estúpidas series de aventuras pá'críos. Es como si se hubiera hecho un paso más. Pero, no nos engañemos, ver la tele es ver la tele. No es hacer mucho más que ver los ojos de los actores, como dijo McLuhan, Marshall (le perdí la pista y no sé si se siguió su plan y ya lo hicieron Superintendente del FBI, o si no lo ascendieron). Sin embargo, ahora hay darle un toque intelectualoide a ver la tele, no es un mero entretenimiento sino que hay que decir que es algo más que tiros y asesinatos. Es un retrato social de relevancia que marca pautas y que refleja actitudes del colectivo y eso se concentra en "el guión", es decir, en la escritura como base de la cultura.

Y nos dicen, para confirmar el reto intelectual que supone ver la tele:

El repte de no entendre tot el guió.
No se dice que está mal realizada la serie, cosa que no sería nada raro. La culpa no es de la serie, es del cerebro del televidente... El propio televidente se recorta su inteligencia rompiendo las ideas que el filósofo utilitarista Hobbes había elaborado en el siglo XVII.

No es que esté mal hecho, es que es tan elaborado. En vez de decir que estamos ante un culebrón lleno de toques de folletín. O que ya Hergé había imitado al folletín del siglo XIX en su Tintín en 1920.

Metamos diez guionistas y 20 personajes (dos por guionista), cada uno de los cuales puede interactuar con los demás. No, más aún, han de interactuar con los demás en alguno de los episodios. Y hagamos a esos personajes a base de usar estrategias de las técnicas de mercadotecnia (Marketing o Sociología del Consumo) y de Investigación de Mercados, para que esos personajes sean el reflejo de lo que cada grupo de consumo quiere ser. Se inventan tramas que no dejan de ser secretos que son las interacciones aún no efectuadas. Ya está. Cosas que no se entienden y todo eso.

¿Dónde se crean las historias?

La història s'inventa en edificis grisos: sense llum natural, tayloristes.

Taylor, Ford, la cadena de montaje... El fordismo crea postfordismo en cadena.

"Embrutar-ho tot". Càmera a l'espatlla, imatges desenfocades, baralles...
"Ensuciarlo todo". Me alegra que eso se dijera en ese documental. Un grupo gafapa es el conformado por el torrentismo de Santiago Segura y otros. Los intelectuales basura y los intelectuales de la cultura basura. Gente que se supone que saben mucho de todo pero que lo que más les va es lo sucio. El frikismo de camisa negra. Lo veo relacionado, de forma abstracta, con la idea de que una secuencia no tiene que entenderse a nivel visual o gráfico, que no se tiene que ver quién pega pero sí que se tiene que saber que se pega, que se hace mucho daño y sangre, que el bueno es más malo que el malo, y repetir lo sucio de esos personajes tantas veces como sea posible. A eso se añaden las nuevas técnicas de usar imágenes grabadas con móviles, con webcams, etc. Que todo lo asqueroso parezca cotidiano y normal, para que el cerebro se lo trague y lo asimile. Es suciedad para gente limpia. Un poco a lo élite de 1984. Es una nueva variación de lo que ciertos sociólogos llamaron... En eso encaja que la violencia sea el género por excelencia. No es correr, es caer. No es salvar, es operar a corazón abierto y sin anestesia.

TV: conflicte, personatges, dramatismes. Basat en el cinema dels anys 70

Eso del cine de los 70 es algo que otro tendría que explicar.

Lo de los dramatismos se refiere al exceso de sentimentalismo, de gritos y lloros, de sensaciones de que los personajes pierden los estribos de su vida continuamente. Y eso contado como si esa gente fuera de verdad.

A su lado, comprobemos, ya fuera del documental, cómo las pelis de los años 70 mostraban unas calles sucias, con coches usados y gastado que soltaban humo. El cielo podía ser gris, nublado. Podía llover y todo.

En los años 80 comenzó a imperar el clima mediterráneo-subtropical de California, que parece ser una especie de Tenerife del tamaño de la Península Ibérica.

Desde los años 90 y hasta entrado el siglo XXI, no veremos una calle sucia, un coche que no haya pasado por el lavacoches (jamás tendrán el chasis rayado, ni golpes, ni el reborde del limpiaparabrisas sucio). La primera vez que me fijé fue en series españolas pero lo achaqué a la nula calidad de esas producciones, donde no importa más que colocar la serie en la pantalla y esperar a que suene la flauta (y la técnica del burro flautista, contra la sarkozité, volvió a funcionar: si es birrioso pero todo lo llenamos de birriosidad y decimos que está muy bien porque los actores son guapetones, la gente lo verá). En esas ciudades de las películas, todo son casas con jardines y aceras inmensas (hasta los años 00 creo que no se veían esos acerones en urbanizaciones). No sólo los actores van recién peinados. También los árboles están recién peinados.

Conclusiones: no hay.

2 comentaris:

Kaximpo ha dit...

Tienes un guionista para los posts, ¿verdad?, porque no he llegado a entender todo...

Sí, parece que ahora ver una serie "da caché" aunque sea un rollo incomprensible. Parece que las series "empezaron ayer".

Sobre la continuidad: estoy de acuerdo sobre los álbumes que se puedan leer independientemente. Paso porque haya alguna llamada a un álbum anterior que te incita a leerlo para descubrir que NO hacía falta leerlo para entender el siguiente pero otra cosa me parece engancharse a un culebrón...

Sin embargo, también en los culebrones puedes entrar y salir cuando quieras porque tampoco ha pasado NADA, nada es nada...

Conclusión: yo tampoco tengo conclusión.

maginelmago ha dit...

No es que tenga un guionista: es que hay errores y olvidos. Ejemplo Tintín: 1929, no 1920.

En los culebrones no ha pasado nada... en "Héroes" o en "Perdidos" o en... tampoco ha pasado nada.

Ejem, sí... notarás que he introducido con calzador el tema de la continuidad... para ver si lo desarrollo en próximos mensajillos del blog.