20160905

Víctor Mora: aventuras y casi empoderamiento

Data Estel·lar del chápiro verde Dilluns 20160905


Mensaje enviado a la lista de correo del Capitán Trueno. Tendría que ampliarlo pero no tendré tiempo para hacerlo. En este caso mejor algo a medias que nada.
 
Si digo que me lo he pasado bien con sus tebeos es redundante: si no, algunos no nos habríamos pasado años en una lista de correo sobre el Capitán Trueno. Es posible que os pase que nos cueste saber qué serie o qué personaje os gusta más. Hay quien tiene muy claro: me suena fácil decir "el mejor es Goliath y a Crispín le hubieran dado gorrazos en mi barrio" como leí en una entrevista desafortunada una vez. Pero es que ¿habéis leído El Corsario Verde? Pues cuando conocí esa serie de tres tomazos en Ediciones B (osea, corta, para lo habitual) me llevé una grata sorpresa: ¡abundaba en temática de Asia Central, de pueblos mongoles y similares, cosa que siempre me había parecido habitual en Víctor Mora! ¿Y el primer episodio del Corsario de Hierro? Es insuperable, como la pirata, su segundo enamorado o el peligroso hipnotizador (no digo sus nombres para obligar a que los busquéis y leais).
Y además esos personajes pintorescos del Sheriff King que nos plantan en la cara algo que no sé si se tiene muy claro: que Víctor Mora escribe aventuras pero que muchas veces es, antetodo, un fabricante de situaciones cómicas, cosa no habitual en el comic de dibujo serio... al menos hasta Masacre.

Os contaré una de esas anécdotas que no llevan a ningún lado. El día anterior a que me comunicaran la noticia (me la contó mi abuela, en tanto yo no estaba al tanto de las noticias por ningún medio: lo que se llaman vacaciones) estaba pensando en cómo haría yo una película del Capitán Trueno. Pensándolo bien, podría ser el "cómo haría yo hoy un tebeo del Capitán Trueno" pero pensaba en esas adaptaciones continuas de superhéroes y en algún anuncio de esos no-ZipiniZape de las películas. Entonces pensé que hubo una censura adicional en los guiones, algo que Víctor Mora dejaba intuir, y que sus críticos solían dejar constancia pero que nunca quedaba explícito.

Me refiero a la toma de conciencia colectiva de un pueblo que, me temo, la censura o autocensura convertida en "lo que quiere el público porque así es al cultura popular y de masas".

Cada vez que el Capitán Trueno ayuda a salvar a un pueblo oprimido por medio de un heredero o príncipe hereditario legítimo (léase al sociólogo y economista Max Weber sobre la legitimidad tradicional) a mí me chirría. Una vez, dos, tres... pero ¿siempre? ¿tantas?

Suena muy político pero es que hablamos de un Víctor Mora metido en actividades "subversivas contra el régimen", un comunista del PSUC contra el Franquismo, que entraba y salía de la prisión, así que el contexto lógico debería haber sido que el Capitán Trueno "y sus amigos" llegaban a un lugar, se encontraban con un pueblo oprimido por una dictadura (llámese un tirano, un malvado, un loco excéntrico y cruel) y optan por una triple batalla para cambiar el orden establecido:

1.-La lucha militar. Se acabarán enfrentando.
2.-La lucha psicológica o de imagen  o de percepción o de opinión pública contra la dictadura (o contra los nervios del tiranuelo): Crispín y Goliath lanzando chistes contra el tirano. No sucede siempre pero es de lo que más me gusta. Ahí siempre recuerdo el bajel de Tochiro
3.-Toma de conciencia de la población. Suele aparecer levemente pero, en una versión "completa y sin censuras"  (y por eso digo en una película) debería aparecer claramente: la población acepta cambiar de régimen, de forma de regirse, de cultura política, de modos de acceso al poder y de gestión de los problemas, así como aprenden una nueva forma de solucionar cuestiones y problemas, así como la propiedad de los medios de producción (comunismo, PSUC). Genera, y se tiene que ver, pequeños núcleos democráticos o predemocráticosm, que luego resulta que igual sí que existieron en el pasado hasta que llegaba el duque o el obispo o el bárbaro de turno, o el rey absolutista o el imperio colonial.

Luego nos falta lo siguiente: ¿y si realmente el Capitán Trueno cumpliera su palabra de "nos volveremos a ver, regresaremos algún día" y se encontrara con las consecuencias de sus hechos años después? Mirad qué historietas podrían aparecer: la evaluación de lo sucedido, el éxito o fracaso de sus propuestas, el si se consiguió un sistema más justo o se mantuvo la injusticia o si simplemente cambió de manos la tiranía. Pareto o Mosca: teoría de las élites http://www.voltairenet.org/article179164.htmln  http://pendientedemigracion.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/E/teoria_elites.htm

Es decir, ¿consiguiéron el Capitán Trueno, Goliath y Crispín cambios buenos para la población?, ¿"empoderaron" a todos y no solamente a los de arriba? (ah, si no os gusta Podemos y su lenguaje, os diré que no lo inventaron ellos) ¿O no?
Gracias, Víctor Mora, porque me lo he pasado bien, porque he visto duelos a espada, porque el Capitán permite a su oponente que recoja la espada para seguir la contienda (bueno, eso me ha ido mal en la vida real), porque me reído y porque me has hecho pensar. Y porque aún quiero saber qué fue de aquellas cebras pintadas como tableros de ajedrez del Jabato.

Más aún es ir hacia su serie Supernova de los años 1970, que por supuesto suele ser eludida en todo recordatorio de la obra de Víctor Mora. Descolonización, Tercer Mundo, guerras en países subdesarrollados, cinismo occidental y cinismo de un personaje que parece estar de vuelta, y un inédito protagonismo femenino habitualmente negligido cuando se habla de comic o de obras con presencia femenina clave. Nada nuevo bajo el cambio climático.

Sí. Hay una lectura política y que se puede analizar en clave de Ciencia Política (ah, quién pudiera haber cobrado por ello... de haber nacido burguesito...). No hay que huir nunca de dicha visión de un texto que aparentemente sea de evasión o de ficción.