Duda lectora

Data Estel·lar aish Divendres 20140328

Tengo una duda lectora: ¿leer primero Marvel La Historia Jamás Contada por Sean Howe o leer primero Narrativas Transmedia por Carlos A. Scolari? ¿Mar o Nar?

Igual el orden de los factores me altere un poco el producto. He comenzado por el primero y veo casi todo sí ha sido contado alguna vez... que para eso hemos tenido a doctores Átomos, profesores Loki o correeros tipo Fonseca. 

Sobre el segundo libro, me interesa que por fin se haya teorizado o esquematizado algo tan obvio a lo que alguien, y no miro a nadie, le da vueltas desde 1993. Eso de no estar en la sopa adecuada.

Pero el resultado final será que no creo que haya nuevo bajo mi Sol. Nada que no haya intuido, leído o aprendido antes. Puede que más ordenado pero no mucho más.

Evidentemente, todo esto va regado con dosis generosas del programa Sálvame que contiene el mismo tipo de narrativa que Marvel. Seguramente sus guionistas actúan por imitación de Marvel o DC, con sus sagas largas que luego quedan cercenadas por falta de público, sus crossovers, la incorporación de nuevos personajes (Aguasantas... y qué nombres tan sonorso que tienen todos) o la inserción de familias de personajes de otros lados (los presuntos periodistas paparazzi del corazón que llegaron de los programas del corazón al cerrar A tu lado y Dónde Estás, Corazón). Es lo mismo que Wonder Woman o Uncle Sam incorporados de otras editoriales en DC. E incluso mejor incorporados, no como los Ultraverse, desaparecidos tras entrar en Marvel.

Las tramas tienen enfrentamientos y alianzas con malentendidos continuos entre personajes con los que cada sector del público se sentirá identificado, por más falso que sea todo (la mayoría son de clases medias-altas y, pese a su hablar bronco, no son de origen barriobajero y sus referentes culturales son distintos a los de la audiencia). 

Existe un Stan Lee llamado Jorge Javier Vázquez, una especie de coordinador mediador en forma de periodista y presentador que aporta la chispa y el gracejo, la ironía distanciadora y el acercamiento real o simulado con el público real, de barrios de polígonos de viviendas, clases bajas y medias-bajas, bajo nivel cultural... en fin lo que no sale nunca reflejado en las encuestas de audiencia de los medios de comunicación.

Las historias y las anécdotas continúan sin parar, los personajes mezclan sus relaciones, saltan sorpresas y hay una intervención de cuestiones sociales o de actualidad.