20170506

¡Es alucinante, alucinante! Tranqui y Tronco inmejorable

Data Estel·lar baríbará Dissabte 20170506

MENSAJE 1700 DE LA MAGINOTECA.
p3v9: Y el Enano sólo repite "¡Es alucinante! ¡Es alucinante!"


Nunca hemos de perdonar que Tranqui y Tronco no tuvieran una serie de coleccionesole por parte de Ediciones B-Grupo Zeta. 
 

A partir del 2017, puede solucionar ese grave vacio editorial la empresa que ha comprado el Ediciones B, extirpándolo del Grupo Zeta: BertelsmannPenguinRandomHouseMondadori, oligopolio europeo-australiano (Alemania, Reino Unido, Australia, Italia y España, que suele ser una colonia económica italiana como se puede ver con Endesa o, en breve, con las Autopista de "Florenmásvalepedirquerobar").

Por supuesto, no tengo duda de sus decisiones al respecto. 

-Cri-cri-cri...

-Cállate, Willy... Alf hablando con un grillo.


En La Maginoteca, cuando nos reunimos, o incluso sin hacerlo, siempre dudamos con la obra de March. ¿Preferimos El Mini Rey o Tranqui y Tronco? El primero es muy curioso porque es un reyecito que huye de los morosos... Felipe II, III y IV, los Austrias, no tuvieron problemas: declaraban la quiebra de las arcas públicas y le daban palos al que molestaba, como habían hecho reyes anteriores medievales, por cierto... contra los cátaros y otras gentes que pedían su dinero.

Pero, al menos, Tranqui y Tronco, duraron más. Salvo error u omisión, abjurando de la última etapa (años 1990), de dibujo minúsculo y mecánico, la segunda etapa (a partir de 1987) se convierte en un poco repetitiva, porque acaban siendo una mezcla de Mortadelo y Filemón, Segis y Olivio pero con jefe, o Chicha, Tato y Clodoveo... en vez de ir de jóvenes marchosos, van de trabajadores de una empresa, con jefe de traje y corbata, aunque parece ser una empresa de algo musical, pero no nos queda claro, así como el trabajo de ellos, que es lo de menos. El caso es que, incluso esa etapa, nos da momentos insuperables como veremos a continuación.

La primera etapa, en Editorial Bruguera, es la mejor, porque ejercen de jóvenes modernos, que da igual si son punkis o roqueros o lo que se tercie. Raro es que vivan en una casita con jardín porque parece que tendría que ser un entorno mucho más urbano, céntrico pero también poligonero... pero lo último es imposible porque una ley no escrita o no explícita impide que el comic español, salvo para hacer novela gráfica nostálgica o historias de drogas, hable de barrios obreros, de grandes bloques de viviendas, con griterío, dificultades de aparcamiento, variedad de población en orígenes, edades, modas y creencias... en fin, es lo que hay. Si ni siquiera los llamados "Grandes" fueron capaces de hablar sobre los obreros industriales en plan jocoso y solamente hacían historietas de oficinistas que nos dan la visión absolutamente falsa de que había más oficinistas que peones de albañil o que oficiales de tercera en máquinas textiles...

March suele ser olvidado: no hay recopilatorios. Tras su paso por Ediciones B-Grupo Zeta y el cierre de sus publicaciones, jamás hemos visto que ninguna editorial con cara y ojos le publique nada. Que él decidiera, supongamos, abandonar el panorama tebeísticos no es suficiente, la verdad. No hemos leído jamás que haya tenido, por tanto, haya renunciado a, una oferta para decirle: "nos gustaría publicarle algo: dibuje, ande, buen hombre, y hasta le pagaremos si eso"

Su humor es brutal. Tiene una capacidad para liar una historieta absurda sin salirse de los límites de lo que existe en nuestro entorno. No necesita, al contrario, que Vázquez, por ejemplo, sacar un elefante de un armario. 

Lo peor de las historietas publicadas por Ediciones B-Grupo Zeta son la ausencia de títulos en una gran cantidad. A esta la titularemos, por tanto, como "Es alucinante", porque es la frase que repite uno de los personajes... dejémoslo claro: cuando el lector -yo- se da cuenta de que repite 3 veces el mismo latiguillo, en vez de recordar que fue un modismo insistentemente habitual entre 1987 y 1991, opino que nos está tomando el pelo, que no se ha esforzado en buscar un vocabulario variado... ¡pero luego nos damos cuenta de que es un efecto cómico que se convierte en un recurso humorístico cuando el Jefe se refiere a ello! 

Estamos en una especie de historieta demencial, que se puede expandir indefinidamente, como tantas de March... y, ojo, porque a mí me hubiera dado igual, que cuantas más páginas, más me río. Imaginad un vídeojuego humorístico teniendo que decidir sobre la base de este guión: buscando una puerte, eligiendo que el personaje diga "es alucinante"... perdiéndose en el cuarto de la limpieza...

Ahora que ya he tenido oportunidad de leer literatura de humor, de ver películas, series de televisión, tebeos de muchos autores y países, y de escuchar a humoristas antiguos y modernos, monologuistas y gente que hace sketches en radio y tele... me sorprende que ninguno de ellos cite a March. Puede que no lo conozcan ni lo haya leído y muchas veces me planteo que así sería porque tienen menos gracia, aunque cobren más y estén mejor valorados.

Nos encontramos ante una historieta de 4 páginas, con guión y dibujo de March, que ha sido escaneada en formato A3 (dos páginas por imagen) y a 600 ppp de calidad. Últimamente hago hincapié en que, pese a esa presunta gran calidad, a mí de la sensación de que la imagen sale algo flojindonga y claruja.

Fue publicada en Super Mortadelo número 27 con fecha abril de 1988.




 La historieta lleva el numerito 7451, como corresponde a los buenos dos o tres primeros años de Ediciones B-Grupo Zeta, y que nos sirven para fechar u ordenar las historietas y ver si si hay cambios o evoluciones estilísticas, gráficas, de humor, de guión, de aparición de personajes. En Ediciones B-Grupo Zeta, los numeritos llevan el formato del número de cifras como el número total, como usamos los números habitualmente, frente a la versión más industrial de Editorial Bruguera que ponía 5 cifras para cada número. 

Como vemos, el final de la historieta es tal cual de "la vida privada de Mortadelo y Filemón": cuando viven en su casa, y leen la noticia de que sale de la cárcel un exconvicto y que puede que llegue al piso de Filemón para vengarse. Sale en historietas de una o dos páginas de mediados-finales años 1960. Es lo que nos muestra el rasgo de agotamiento de March con respecto a los personajes, o igual un editor aburrido le leyó la cartilla y le dijo "copia a Mortadelo y déjate de innovaciones". Así y todo, March no nos defrauda.

 P.d: abusa mucho del nombre "Enano" para referirse a Tronco. Se ha abusado mucho del mismo, como si alguien de baja estatura lo fuera, de igual modo que se ha abusado de la criminalización de los gordos y gordas en la campaña pro-anoréxica que dura hace décadas (el gran negocio de las dietas). A Bermudillo se le denomina "enanucho" (p23 tomo 3 de Dolmen Editorial), a Pablo Mármol de Los Picapiedra, también. Son tres ejemplos al vuelo. Ha sido muy repetido en muchos contextos presuntamente graciosos. Un poco vale, pero a la altura de los años 1980 el vocablo estaba agotado y comenzaba a ser innecesariamente insultante y, por tanto, poco o nada gracioso.




2 comentaris:

Anònim ha dit...

ME ha gustado. A estos no los conocía, la verdad; y es que por esos años dejé de leer tebeos y me centré ya en los libros, como corresponde a esa secuencia clásica de iniciación a la lectura de aquellos tiempos ya pasados en que no había Internet: cuentos-tebeos-novelas.
¿Y de verdad habías olvidado "alucinante"? yo aún lo digo...
carlos

maginelmago ha dit...

Aclaración: Lo que había olvidado es que "alucinante" se utiliza porque era un modismo. Aún se usa, aún lo usamos unos cuantos pero se sobreutilizó el uso del térmiino allá por 1988-1991 (pongo fechas ammplias por si acaso). Si te gusta esta historieta, prueba con alguna del Mini Rey.
Asimismo, sacó una serie llamada Todos Estamos Locos o incluso Todos Estamos SuperLocos, pero eran chistes temáticos, a veces bastante malos o con una caradura que ni el chiste de la manzanilla de Ramis, oiga.