20151113

El Tebeo del Saló anuncia Zinco

Data Estel·lar retrocontinuista Divendres 20151113

Una compra inusual fue la de El Tebeo del Saló de 1988. Corresponde a la fecha: maig 1988. Precio: 25 ptes. (aunque sospecho que lo regalarían con la entrada a tan magno evento). Editat pel Saló Internacional del Comic de Barcelona. El coordinador era Josep Gálvez. O lo que es lo mismo: siempre son los mismos.  El transcriptor de la Crònica d'una jornada particular fue Carles Santamaria, y adicha mesa redonda asistían Alfons López, Vázquez de Parga y Antonio Martín y Antoni Remesar. Por tanto, de nuevo, nombres muy conocidos. Alguien me dijo una vez que "el mundillo era pequeño". Para entonces yo ya sabía que era falso, como mínimo en formato "percepción errónea". Ahora que hago retrocontinuidad, veo que es imposible que el mundillo sea tan pequeño.

Es una revista interesante por varios aspectos: no el menor es su formato, equivalente al de la revista TBO de Ediciones B-Grupo Zeta, Guai! de Junior-Grijalbo y algunas anteriores de 1986, de Editorial Bruguera.

Otro aspecto muy destacable es la voluntad de continuidad: es una revista periódica anual. Sale cada año. Salió cada año. Salió cada año, al menos hasta donde tengo controlado que sería como 1995 (menudo control). A mí me gusta ese tipo de revista. No fue sustituida por nada mejor. Luego dieron un folleto ridículo, con un plano imposible de utilizar: parece mentira que la historieta esté formada por dibujantes, diseñadores o periodistas. Sí, ya: es el mismo plano piojoso que da cualquier feria de muestras. Correcto: he ahí el error. Si los demás hacen algo mal o fatal, lo idóneo es no repetirlo. Ficomic optó -Saló del Comic, Salón del Manga- por repetir ese error de un plano incomprensible y evitar revistas con artículos que sirviera de anuario o de registro de acontecimientos sustanciales del mundo de la historieta.

Un blog, una web, un facebook, una cuenta de twitter, un whatsapp, un foro, nada de eso sustituye ese documento en tanto que oficial. Recuerdo alguna revista con un listado pretendidademente exhaustivo de lo publicado en España  (comprobando tebeos infantiles uno se dio cuenta de que no). Era una verdadera guía muy interesante. 

Parece lógico que Ficomic ofrezca, no sólo máquinas de vídeojuegos sino también un documento informativo que diera su visión del sector. Curiosamente, el posteriormente director, Carles Santamaria ya estaba allí.

Pese a todo, intentamos hacer un anuario tebeístico muy personal y adaptado a nuestros intereses, a la par que colaborativo y siempre ampliable.


Hum. Me temo que me estoy mordiendo la lengua. Eso no está bien.

El caso es que esa revista incluye anuncios, como el de Ediciones Zinco.





Aunque en 1988 apenas se veían esos tebeos -digo yo que en algún sitio de la ciudad de Barcelona o en algún centro de los pueblos-. Me ratificaré: que no se veían porque me dedicaba a mirar kioskos y tiendas y habría un superman o un Flash. Eso de Dylan Dog o de personajes de Bugs Bunny eran tebeos inexistentes. De hecho, en 1988 lo que era fácil de encontrar eran superhumores de Bugs Bunny y sus amigos de la extinta Editorial Bruguera.

Más aún: pasadas varias décadas, no me suena haber visto esas cosas en mercadillos ni en paradas del Saló del Comic. Sobre el Dylan Dog, he visto historietas de Zinco posteriormente a las ediciones de Aleta.

De todos modos, es una evidencia el anuncio de la época de mayor exuberancia de tebeos. El Tebeo del Saló es una demostración de esa variedad: aún hay restos del comic adulto cuyas revistas estaban en desaparición, y hay también tebeos de superhéroes de Marvel por Forum y de DC por Zinco, y de First Comics por Tebeos s.a. del Grupo Zeta... es la época de mejora de las revistas de Ediciones B-Grupo Zeta, de su asentamiento y personalización, reduciéndose la poca calidad inicial.

Aprovecho para decirme a mí mismo que Zinco no es del Grupo Zeta, aunque la Z me despiste siempre.

Pongo la carta de despedida de Miguel G. Saavedra publicada por eljoni en Dreamers. En enero de 1997 Ediciones Zinco cerraba al perder los derechos de DC que fueron al desastroso, avaricioso (precios muy caros: ¿alguien en México tenía renta disponible para comprar eso que ya era carísimo en España? cuatro hojas, 600 pesetas).. El fin de una época.