20090325

¿Dónde van esos tebeos y libros inencontrables?

Data Estel·lar hemlockshemlokiana Dimecres 20090325

Aunque lo pueda parece no es mi intención hacer propaganda de esta empresa.

Más bien es mi intención denunciar a los acaparadores que, tras años de esconder, eliminar del mercado, hurtar al público la satisfacción de sus necesidades, venden, compran y revenden stocks de libros y comics de forma opaca.

Mirad este catálogo

Stock de stocks

En concreto, la página 15. Es suculenta. E inaccesible en su contenido:
Fotocopiada y escaneada

La parte de Grijalbo (Ediciones Junior-Grijalbo) ha sido inaccesible prácticamente desde el momento, allá por 1999, en que esta olvidada editorial cerró su apartado de comics al ser adquirida por una empresa transnacional italiana. Siempre suelo hablar de Bruguera... pero es que el caso de Grijalbo tiene el rasgo de ser más desconocido, pese a ser mucho más cercano. Se dio ya en la Era Internáutica Común. Es el Eric Castel, de Grijalbo... a menos de 5€... cuando lo mismo en Norma vale 12€. Luego vuelvo a Norma.

¿Y qué decir de los tebeos de Juventud: una vez vi un poster de Yakari, cuando en el Saló del Còmic de Barcelona aún ponían algún cartel en catalán, o sea allá por 1989. Pero nunca vi uno de estos álbumes en ningún establecimiento. Sé que se venden Yakaris en una librería de restos de poda en una calle turístico-comercial del Barrio Gótico de la Ciudad Condal. Pero eso lo he descubierto hace unos meses. Sin embargo, mirad: aquí estará casi toda la colección.

O el ejemplo de Cori, el Grumete, que yo sólo he visto un par de veces de casualidad. Y que me creí afortunado por conseguirlo. Pues resulta que hay galeones enteros de grumetes.

Y ya he vuelto a Norma: álbums a menos de 5€, de una editorial que por ese precio no da ni la hora.

En el catálogo de cosas en castellano, hay Magos del Humor (o sea, no sólo cosas descatalogadas) a precios bajísimos: a menos de 5€.

Pero vuelvo a lo descatalogado. ¿Por qué ha sido imposible encontrar cosas de Grijalbo desde el mismo momento de su cierre, a excepción de unos cuantos tomos de Spirou, por supuesto, nunca los de Franquin? ¿Habéis visto en muchos sitios los tomitos apaisados de Carlitos que publicaba Grijalbo-Mondadori en estos años?

Yo pensaba, por lo que se deduce de casos similares -como el momento que Panini le quitó Marvel a Planeta, cuando se decía que Planeta sólo podría poner a la venta por unos meses el stock que tenía de sus Comics Forum de Marvel-, yo pensaba que era por una cuestión de derechos. Que no podían venderse. Se habrían destruido. Me parecía raro porque nada se destruye pero... igual el siguiente propietario de los derechos de tal serie o personaje se los habría quedado.

Ahora pienso que es mentira, incluso lo que se contaba por los sitios de Internet sobre Planeta. Simplemente, todo ese material estará en algún oscuro almacén en manos de algún acaparador.

Entretanto, los lectores interesados ya habrán abandonado su antigua afición por tal serie o personaje.

Entretanto, sin embargo, un toque de justicia poética, que dirían en EC Comics: el escáner o explorador de imágenes ha llegado para salvarnos. Las paginas de descargas y de archivos compartidos... el papel es menos necesario para el lector. Y acaparar deja de ser tan buen negocio, porque es posible conseguir gratis el agua que no han sido capaces de poner a la venta en medio del desierto.

¿Qué pasa con esas series que un día desaparecen? ¿Qué pasa, por ejemplo, con los álbumes de El Incal que tenían el color válido y no el actual? ¿Estaban agotados? (sí, de buscarlos, ja), ¿los quemó la editorial? ¿recicló su papel? ¿O los tienen revendidos y almacenados en algún europalet a la espera de un tiempo que ya nunca será mejor?

Lo que desaparece, existe.

El caso más claro es de los Mestres de l'Humor, la fallida colección Magos del Humor en su versión en catalán. Ibañez comentó en el Canal33, hacia el 2001, en el programa Paral·lel (si no me equivoco), a la pregunta de "y per què no en català?", que ya se intentó por parte de la editorial pero no era rentable. Eso fue entre 1989 y 1992. En esas épocas, en poquísimas ocasiones se podían encontrar esos tebeos en tiendas, al menos, por Catalunya, igual en Huelva era otra cosa. Luego desaparecen sin pena ni gloria. Uno imagina que el número de ejemplares era ínfimo y que no existirán. En el 2002, de repente, comienzo a ver Mestres de l'Humor por todos lados. Éxito de ventas en las escuelas, decía un comercial. Estaban en cadenas como Happy Books (una cadena de librerías que entonces tenía la friolera de 2 tiendas, aparte de la matriz, La Formiga d'Or), para desaparecer de golpe en el lapso de un verano. Pero desde entonces, intermitentemente han estado presentes. Más aún, tienen que existir muchos ejemplares, porque distribuidoras como la de nuestro ejemplo, los tienen a la venta aún en el 2009.

He hablado de los tebeos, pero lo mismo podríamos hacer con los mismos.

Esta empresa no es ni mucho menos la única: ellos habrán comprado a alguien y luego se han buscado la vida (segmento del mercado: escuelas y bibliotecas, etc.). La pongo como ejemplo, porque es su catálogo el que me topé.

De todos modos, no son inocentes: "Se trata de libros nuevos en oferta de diferentes editoriales de primera línea, que por razones de remodelación o bien por exceso de estocs, se pueden adquirir a bajo precio." No son libros nuevos (son viejos, aunque sin usar). No son editoriales de primera línea cuando ya ni siquiera existen (o sea, que de ninguna línea), etc.


P.d: Atención a los aficionados a Superlópez: es denominado "imitador de Superman". ¡Arrrgh, eso duele!


A mí estas cosas me hacen reflexionar mucho. No sé por qué.